Isaías 33 - El Señor es nuestro legislador y nuestro rey

Isaías profetiza la destrucción de Asiria debido a sus muchos pecados. Es cierto que Dios usó a Asiria para castigar a todos los perversos dentro de su pueblo. En otras palabras, ellos fueron su instrumento para purificar a su pueblo; pero debido a su crueldad, traición, y abundante destrucción, Dios se encargaría de castigarlos y destruirlos a ellos. Asiria fue una verdadera máquina de destrucción en la antigüedad. Parecían invencibles. Pero para el Señor no hay nada imposible. Y como Rey justo y poderoso, Él siempre hace justicia. Aquí se habla de Asiria como una nación traidora, mentirosa, y que rompía sus promesas, y no tenía respeto por nadie. Toda nación que haga esto, y especialmente contra el pueblo de Dios, está en peligro de sufrir el mismo castigo. Y a nivel personal, Dios espera que nosotros seamos personas honradas, respetuosas, y que siempre digan la verdad. Que el Señor nos ayude a andar en sus caminos, y a siempre vivir en armonía con su Ley y con su Palabra. Que el Señor te bendiga.