Cotorreo con Don Miedo

¿Cómo sonaría hablar con tu miedo más grande? 
Si te lo topas,  ¿le invitas un café, o chelitas bien heladitas?

Transcript

Cotorreo con Don Miedo

Puede que sea la temporada de Halloween, o que tambien se acerca el día de muertos, o tal vez nomas una plática pendiente.

Aquí va como se vería un cotorreo con mis miedos si me sentara con ellos a echar un café, o chelitas bien heladitas.

Porque si supieras que va a llegar, como lo recibes?  Tiene horarios? Porque a mi se me aparece en horas no deseadas de repente

¿Y si te hablara le contestas? O lo mandas a buzón?

¿Cómo sonaría hablar con tu miedo más grande? 

Que espantó el sentimiento o los nervios de escucharlo

A veces suena a fracaso o a rechazo 

Vive e Frases como:

Que miedo no lograrlo 

Que horror estar perdiendo el tiempo 

Pero para mi, las frases han ido cambiando:

Ahora me da más miedo quedarmee a medias 

En un punto si fue eso de:

Que miedo que te vean fracasar, tropezar, no ser perfecta, los rechazos

Y luego despues de una que otra equivocada, el miedo tambien ha sonado en frases como

Que pereza empezar de cero, pedir ayuda o caer en el mismo hoyo

Si existe el miedo

Si nos culeamos 

Si nos hace chiquitos

Da pavor caer en el abismo, aventarse con incertidumbre sin saber hasta donde esta el fondo

Es ese sentimiento de saber que no tocas el piso, ni vez la luz, esos momentos se sienten eternos

Amamos lo conocido, lo fácil, lo normalizado

Nos la pasamos buscando tanto la certeza y la comodidad 

Que miedo ir a un lugar desconocido, pero que espanto pasarla pensando en que en algon momento vamos a evitar perder, tememos a los finales, sufrimos por que no se acaben los momentos en la cima, evitamos a toda costa que se repitan los mismos errores, la misma historia ,o que te den en donde ya te dieron y dolió 

Me ha pasado agarrarle miedo a intentarlo, a las deudas, a los riesgos, a salir perdiéndole.

Me ha costado perderle el miedo a los finales, a los desapegos, a la dependencia y a no tener siempre la certeza.

Cuando nos venden el miedo en las películas, en los libros o en los cuentos, por lo general viene con peligros, con una connotación negativa, monstruoso, ruidoso, doloroso, acompañando de fantasmas (de los que te siguen), y últimamente ya el personaje del miedo lo vemos entendiendo diferente, hasta en las caricaturas lo pintan menos agresivo.

Esas vocecitas que se quedan retumbando en nuestra cabeza, son mas tenebrosas que la musiquita de terror. 

Pero bueno, aquí va el cotorreo que se armo un dia que me senté seriamente con Don Miedo, y que le digo, y que me dice, y así se puso esto…

A ver Don Miedisimo:

Te voy a invitar a regresar cada que veas que no es el rumbo ni el momento, ¿te acuerdas de la vez que nos libramos de una estafa? 

Que buena puntería, ahí neta no le has fallado. Pero échale ganitas en no ser tan imprudente, a veces si me andas estorbando.

Te voy a hacer a un lado cuando ande probando cosas diferentes, ya se que te gusta cuidarme, pero acuérdate que hemos conocido gente increíble en los lugares menos esperado, y hemos encontrad buenos tacos en las esquinas menos transitadas.

Se me olvida que existes cuando vuelvo a los rincones donde fui feliz y rei con singular alegría.

Quisiera decirte que no te necesito, pero que gran mentira decir que lo que he logrado lo hice sin ti. 

Don Miedo, te respeto, pero búscame cuando se me olvide lo valioso que es crecer y ayudar a crecer, vivir y dejar vivir. 

Ojalá me recuerdes que las caídas fueron para aprender, porque ahí estabas, me viste irme, pero tambien me dejaste irme como gorda en tobogán sin meter las manos, de hociqueiro. Yo creo que hasta te reíste de mí. 

Me río contigo, cuando me pongo a hacer locuras en mis viajes, yo creo que a veces con mis locuras le he sacado un susto al susto.

Señor miedo, me estorbaste un tiempo mientras me daba cuenta que el fracaso no estaba en lo imperfecto sino en lo impaciente.

¿Como le hiciste para que de chiquita me pusieras a llorar cuando me cria las historias de terror que me contaban mis tíos sobre los pasillos embrujados?

¿Te acuerdas de la a historias que me contabas cuando me despedí de mis amigos en la escuela y me hacías pensar que ya no los veía jamás? Se sentía súper real 

Ya pasaron unas décadas y lamento informarte que todavía siguen viéndome crecer, y ya me ha tocado ver a sus retoños.

Miedito, te deje crecer, los días que visitaba la tristeza y la soledad. Sé que te gustan los días grises, los ruidos y las esquinas vacías.

Muchas veces me decías que no estaba bien sentirse solo, andar en lugares sin un futuro seguro y lejos del nido. Sí me has dejado bastantes noches sin dormir.

Ya te dije que no me caes del todo mal, sé que te necesito, vives en cabeza, y en la de varios que conozco y me conocen.

Eso si, deberías de sacarle una tarjeta roja a los que juegan con los miedos de los demás, eso esta pasadísimo de lanza profe.

Se que no andas en burro, a veces traes más anclas que alas. Pero me has prestado ambas.

Eres muy chistoso, a veces me gusta como me haces ver las cosas que jamás imaginé. 

Pero también me pintas los escenarios más culebras y terroríficos. 

Pones a mi mente de cabeza. 

Cuando estás muy cerquita mi corazón siente que explota.

Don Miedillo, vete despacillo porque si te quedas mucho hasta la panza me duele. 

¿Sabes que eres como un artista?

Me has pintado unos demonios cabrones. 

Se ven súper diferentes a las mariposas que sabe pintar doña Alegría.

Si andas bravo me dejas muy confundida. 

Nomás haces ruido y no me dejas ver claro lo que traigo en mi cabeza o en mi corazón. 

A ver, mi querido Miedo,

¿Porque sigues duro y dale que no soy suficiente? 

Ya te demostré que puedo hacer cosas grandes, ya te de mostré que soy consistente,

¿me puedes dar una pista de cuándo va a ser suficiente ser suficiente?

Ya te quite unas mañitas, pero la que te encanta hacer tu entrada triunfal en los días de pruebas.

¿Te acuerdas que me sembraste te sembraste ahi?

¿Porque estás antes y en cada examen? 

¿Neta en todos? Hasta en el de los exámenes colores me haces dudar 

¿Mi miedo más grande? Cuando estaba chiquita pensé que era a las cucarachas, y luego crece uno y dan mas miedo los cucarachos 

Y hablado de eso,

Últimamente eres ese sentimiento de, ¡me asusta pero me gusta!

Esto no es pelea ni reclamo, nomas vamos viendo como nos acomodamos.

Ya nos llevamos diferente, eres grande pero sé cómo hacerte chiquito y a veces te puedo desaparecer más rápido. 

Mira, mi querido Miedo, no se si estas de complacencias, pero tengo unas peticiones por si andas de oferta.

Si se supone que nos vamos a acompañar toda la vida, te pido que le siga teniendo a la indiferencia, a la injusticia, a ser estorbo o piedra en el camino de alguien. 

Recuérdame lo rápido que pasa el tiempo. Porque vaya que le temo a desaprovecharlo y eso si, me has enseñado a vivir a tope cada dia.

Por ti, estoy intentando vencer que un día me alcance el olvido y no pueda recordar las historias de los míos, las que yo hice, y las cosas que me hicieron vibrar. 

Me haces documentar los momentos que tantas risas me sacan y sé que los uso de herramienta para recordar lo que ya fue. 

Tu amiga la nostalgia me ha hecho ponerle voz a mis emociones, y tintas a mis sentimientos.

Escucharme y poder cambiar la narrativa de mis historias ha sido súper sanador. 

Gracias por guiarme a conectarme, contigo, con mi pasado, con mis sueños y mis bellos fracasos. 

Don miedo, que aplastadas me has dado. 

Estás invitado cuando vea películas, pero vete más lejesitos cuando ande conociendo a alguien, por mi no hay bronca, pero has paro con los miedos que trae el de enfrente. 

Ya a estas alturas venimos todos medios ariscos de todo y se pone complicado esto del deiteo (date). 

No eres mi favorito, no es por que seas de los sentimientos mas basicos, pero te la pasas alarmado. 

La neta es que muchos de mis amigos hablan mal de ti, échale ganitas.

Ahí los dejas todos atorados con pura idea catastrófica.

A mí también a veces me caes mal, muy mal. 

Me has sacado montón de lagrimas.

Porque nomás vienes a mover las cosas.

Puedes ser muy contagioso, tipo covicho, o a veces peor. 

En mi hogar, rondas cerca de la estufa y el fuego.

Por tu culpa nomás tengo velas de adorno pero ni encendedor tengo en mi depa. 

Oye, por cierto

Los días que me voy de fiesta, te me desapareces después de unos tragos y me dejas haciendo el ridículo

Nomas te quería decir que te has ido y de repente sale una que otra historia memorable, te la has perdido. 

Antes de que abramos los mezcales, 

Ya deja en paz a los que quieren ponerse románticos.

Sí te echo la culpa de que unos corran cuando se habla con el cora, ¿que les dices o porque huyen?

Ah, ¿qué no están listos? Ta bueno, que tengan suerte con eso.

Esos chismes que me cuentas de los miedos de los demas, ya no los quiero cerca.

Si de por si me he esforzado con la narrativa de los viejos miedos que se me pegaron de los que venían antes de mi.

Me he asustado pero has hecho que sea demasiado curiosa y me la pasé preguntando, todo a todos, así que he buscado la manera de buscar nuevos miedos tambien.

Por cierto,

¿Cómo le hacen los que no te conocen? 

O los que viven así como que no existes

Ya voy aprendiendo a saber si estás visitando a alguien, lo noto en su voz y en sus ojos. 

Ya cambia de máscara a otra más amigable, también de perfume de una vez, luego luego puedo ver si dormiste con alguien.

¿No te cansas de vivir en los bordes? ¿Cómo le haces para estar en las alturas?

¿Vienes y te vas con la muerte? ¿Qué se traen ustedes dos? 

No te hagas el sordo.

Se que me estás escuchando y la neta no la estoy invocando todavia. 

Este cotorreo era mas para conocernos, es más como un recordatorio de como hemos crecido y un acuaerdo. 

Tu sigue de tu lado y yo en el mío. 

¿Te acuerdas cuando viajamos juntos por primera vez? Un vuelo sola a Canadá a los 11 años, que rifados mis papás, gracias a eso nos hemos vuelto inseparables. 

Cuando menos me acuerdo de ti es justo en mis viajes, te olvido por completo cuando voy viendo las nubes.

Ay, me tengo que ir.

No me despido, sé que te veo pronto, si le caes tráete otras emociones y una que otra aventura, no llegues así de sopetón ni solapas. 

Sí te espero para otro cafe, nomás que ando ocupada creciendo. 

Ahi nos vemos, dijo el ciego..