Líderes Agilistas

C071. De la duda al Liderazgo: 3 Herramientas para transformar tu mentalidad

Líderes Agilistas Season 4 Episode 71

En este episodio de Líderes Agilistas, titulado "De la duda al liderazgo: 3 herramientas para transformar tu mentalidad", exploramos cómo superar la creencia de "No soy líder" y desbloquear tu potencial. Aprende a liderar desde tu autenticidad con tres herramientas clave: el poder del autoconocimiento, la mentalidad de aprendiz y la guía de mentores.

Descarga la hoja de discusión en lideresagilistas.com para reflexionar y aplicar estas ideas en tu vida y equipos. ¡Es hora de dar el primer paso hacia el liderazgo que siempre has soñado!

La única persona que puede invalidar tu liderazgo eres tú mismo. Quédate y conversemos. Bienvenidos a líderes agilistas, donde te acompañamos a lograr más balance y mejores resultados. Transformando tu liderazgo a través de pequeños pasos.

Hoy traemos un tema muy interesante que ha surgido de escuchar a nuestros líderes que estamos acompañando en nuestros círculos de liderazgo, que tenemos los martes. Es un lugar de crecimiento muy, muy, muy productivo. A mí me encanta ese lugar y hemos visto algunas creencias que han salido y bueno, hoy traemos algunas porque yo creo que es muy interesante que a pesar de que nos desarrollamos como líderes, siempre saltan esas ideas y no solamente como líderes, como diferentes roles, donde somos líderes como padres, como líderes de nuestros equipos, como líderes de nuestras vidas.

Y hoy traemos una creencia que yo creo que predomina constantemente en nuestras vidas y siempre tenemos que estar llamando la atención como que no, como luchar contra esas creencias. Pero la creencia que hoy traemos es muy muy poderosa y creo que sale constantemente durante la vida. Es no me siento suficiente para tomar el liderazgo, no me siento suficientemente preparado o no tengo la suficiente fuerza. Te sientes: No me siento suficiente para ser líder.

De hecho, cada vez que hablamos de estos temas de ser líder, cuando te dicen vamos a formarnos en liderazgo todo el mundo. Sí, sé que lo quiero, pero no sé si es para mí. Y hay una claridad de que todos somos líderes. Somos líderes, al menos de nuestra propia vida. Y esto es importante porque cuando tenemos esa creencia profunda, recordando un poquito que es una creencia, es esa dirección, esos paradigmas que guían nuestras decisiones de manera automática y por eso se vuelve una creencia.

Está muy profundo en nuestro ser y hay creencias que, no podemos decir que las creencias son buenas o malas, simplemente son útiles o dejaron de ser útiles. Y esta creencia de que no sirvo para ser líder, ¿qué tan útiles ya en tu vida adulta? ¿Qué tan útiles en todo esto?

Y hay una historia que quería contarte sobre una chica que era parte de nuestro grupo de rescate en alta montaña. Era una persona, sabes, todos eran hombres. Las mujeres eran muy poquitas. Y ella particularmente era chiquitita y muy flaquita, muy, muy flaquita. Y había muchas actividades de trabajo físico. Había que cargar a una persona bien pesada en una camilla. Hacer trabajo, sabes, de físico, muy físico y ella siempre se consideró que no podía ser una líder porque su contextura pareciera no ser la persona indicada para liderar y aparte sabes, un montón de grandulones y yo pequeñita ¿cómo los guío? Entonces toda esa idea que estaba en su mente y en una de las prácticas, nuestros instructores y ya vamos a hablar de la importancia de los mentores más adelante los instructores agarran y toman a esta chica y le dice: Ahora tú vas a liderar un trabajo de rescate nocturno en una zona bien complicada.

Y ella dijo ¿Y cómo hago eso? ¿Sabes? Te imaginas toda la tensión, toda la lucha contra sus propias ideas y ese día fue muy interesante porque la práctica de rescate era de una hora y media. Nadie logró el espacio de una hora y media. Éramos cuatro grupos separados y ella lo logró en 40 minutos. Fue la líder perfecta. Mantuvo al equipo animado, los llevó por donde tenían que ir. Los organizó cuando tenía que organizarlos, los regañó cuando tenía que regañar porque la escuchábamos a lo lejos. Y tú dices: Toda una líder cuando decidió agarrar ese toro por los cachos, montarse en el problema y solucionarlo.

Y aquí está la clave. Siempre que tenemos ese problema que solucionar, nos volvemos un líder. De repente nos volvemos un líder.

Así es. Y fíjate, me gusta mucho esto que comentas porque a veces nosotros mismos, como dije al principio, somos quienes invalidamos nuestro liderazgo, porque seguramente dentro de sus compañeros a lo mejor había alguien que decía: Es pequeña, pero ella misma era la que se estaba truncando hasta que llegó estos mentores y le dijeron: Nada, aquí estás, ¿no?

Y vamos a decir así como que le dieron ese empujoncito cuando ya se dio cuenta que habilidades tenía y que lo pudo lograr muchísimo mejor que los demás, ¿no? Pero somos nosotros mismos que nos colocamos esas barreras y colocarnos esas barreras. Qué tiene… Yo digo bueno, entonces no, mejor me quedo aquí sentadito, quietito que donde estoy. Pero la final, cuando te colocas esas barreras te limitas a ir más allá, a crecer como persona, abrirte a crecer como líder. Porque cuando ya tomas otros roles, pues yo creo que a veces la experiencia a ver cosas que a lo mejor tú crees que no eres capaz de lograr, entonces te abres a esa experiencia de decir oye, lo puedo hacer. Entonces te limitas a no ir más allá de lo que tú puedes lograr.

Y la clave está en el problema, como lo mencionas, si surge ese problema en tu vida y tú decides solucionarlo, eres el líder. Ya, ya. De entrada eres el líder. De hecho, si hay un grupo involucrado, el grupo te va a regalar el liderazgo de ese problema. Ahora, si tú decides no ser el líder, deberías preguntarte: ¿Realmente estoy dispuesto a solucionar este problema? Porque si no lo estás, no lo vas a liderar. Ahora la clave está también en el hecho de que ese problema ¿tú de verdad lo quieres solucionar? Vamos a poner un ejemplo. Uno de tus hijos de se cae si se lastima y hay que llevarlo al médico. ¿Lideras o no lideras ese problema?

Seguramente si tú eres el papá, la mamá lo vas a liderar y te vas a montar en el auto, vas a encontrar los recursos, vas a encontrar la manera y lo haces.

Pero a veces tenemos temas como liderar un cambio de hábitos o liderar un equipo para lograr algún objetivo. Y ahí la pregunta es: ¿realmente quieres solucionar ese problema? Porque si no lo quieres solucionar de entrada ya no lo puedes liderar. Y ahí está, en cómo te conviertes en un líder, en cómo te crees a ti mismo un líder. ¿Quiero resolver este problema o no?

Entonces, en esta situación de poderte creer que eres un líder que rompe esas creencias, no de querer ser un líder. Vamos a tocar tres herramientas claves para que puedas poner en práctica ya de una vez y te vuelvas un líder que resuelve problemas. Pero antes de continuar, antes de avanzar con estas tres creencias o estas tres herramientas, te invito a que vayas a lideresagilistas.com porque vamos a dejar una hoja de discusión con todos estos temas desglosados para que puedas seguir el tema, para que puedas tener preguntas reflexivas con tu equipo, para que coloques esto en práctica en tu vida, en tu entorno.

Así que, Berna, ¿Cuál es la primera herramienta que traemos el día de hoy? Bueno, me encanta. Yo antes de mencionar las herramientas quiero traer una pequeña reflexión que las creencias como la historia que nos comentas y como el ejemplo que nos comentaste, puedes romperlo de dos formas: la vida te empuja a romperla. En el caso de tu compañero, llegaron los mentores y prácticamente la empujaron a liderar o una situación difícil que dices: tengo que resolver este problema porque tengo que lidiar de esto y darle la solución.

Te empuja la situación a tomar el liderazgo y resolverlo o no hacerlo también, pero si tomas la decisión es como un empuje a tomar el liderazgo, pero también la forma y ahí te dice: no, sí, sí puedo hacerlo y rompes esa creencia. Pero otra forma de romper esas creencias es de una forma consciente y decir: creo que no soy suficiente, pero quiero romper esa creencia porque es una creencia que por ciertas situaciones lo tienes y por eso traemos estas herramientas, porque es el modo de hacerlo conscientemente utilizando este tipo de herramientas puedes ir rompiendo esa creencia y dándote cuenta que realmente tienes todo lo que necesitas para ser un líder.

Es como la valentía. Tú no puedes ser valiente sin sentir miedo, entonces no puedes liderar sin tener ese miedito de: uy, ¿será que lo logro? Es igual, muy parecido. Exacto. Y bueno, la primera herramienta que traemos creo que es muy poderosa y no solamente para el liderazgo, creo que es para la vida diaria y para todo lo que enfrentamos. Aunque como hemos dicho, eres líder de tu propia vida, así que tienes que usarlo siempre.

Es el tema de autoconocerse. Tener un autoconocimiento y ese autoconocimiento te muestra tanto tus fortalezas que ahí es donde tenemos que poner el foco, porque muchas veces nos enfocamos en las debilidades y nos machacamos allí y realmente no nos va a llevar a nada. En este caso quiero apuntarles: conocerte en tus fortalezas, conocerte en ese superpoder que tú tienes. Cuando te toca resolver algo, cuando lograste algo, es darte cuenta y hacerlo conscientemente, porque a veces nosotros resolvemos algo o salimos de alguna situación o nos toca liderar.

No somos conscientes de qué fortalezas estamos utilizando. Es que de hecho eso de auto conocerte a veces a muchas personas le puede dar miedo por algo muy sencillo, de que cuando eres pequeño que resaltaba cuando ibas al colegio, llegabas con las notas. ¿Cuáles son las notas que resaltan? Las notas que saliste mal y entonces las que saliste bien te dijeron: bueno, chévere está bien, pero ponte a estudiar esta etapa ta ta ta ta y montón de horas estudiando en lo cual no eres bueno y a veces socialmente nos resaltan nuestras debilidades más que nuestras fortalezas.

Por ejemplo, ya saliste del colegio, ahora estás en el trabajo. ¿Qué resaltan tus líderes? Normalmente malos líderes, tus debilidades. No cumpliste esto, no hiciste lo otro. Y cuando lo haces bien, eso es parte de tu trabajo. Ni te dicen nada. Entonces yo creo que lo importante tú como líder, es también resaltar las fortalezas de tu equipo y resaltar tus propias fortalezas. Y ahí regresamos al tema de autoconocerte.

Encuentra tus fortalezas. Todo el mundo tiene aunque si tú nos estás escuchando y crees que no tienes, tú tienes un montón de fortalezas a las cuales puedes explorar y puedes liderar a partir de esas fortalezas. Pero también encuentra las fortalezas de tu equipo. Yo creo que eso también es importante.

Y sobre ese tema de cómo comprender o saber la habilidad de nuestro equipo, vamos a profundizar en un siguiente episodio. En este caso, quiero que te centres en tus habilidades y reconócelas. Y a veces hasta descubrirlas, porque desde allí te puedes dar cuenta y sentirte mucho más seguro de lo que eres capaz. Y yo creo que haciéndolo consciente, cuando necesitas sacar esas fortalezas en momentos de liderazgo las vas a tener presente. Entonces por eso es importante hacerlas conscientes y conocerlas.

Entonces esa es la primera herramienta: conócete a ti mismo, una labor que a veces nos lleva toda la vida y lo lindo es que siempre cambiamos, entonces hay que estar conociéndonos todo el tiempo a nosotros mismos.

Y la segunda herramienta sería entonces Berna… Y la segunda herramienta, por supuesto, ya nos conocemos y tenemos que, como somos conscientes de cuáles son nuestras fortalezas y allí cuáles son nuestra oportunidad, a mí no me gusta llamarlo debilidades, nuestras oportunidades de desarrollo, pues estar muy abiertos a siempre, estar constantemente formándonos, constantemente buscando conocimiento, constantemente buscando lugares de crecimiento.

Y yo creo que como líderes de nuestra vida, eso es, tenemos que ser constantes aprendices, ¿no? O sea, no llegas a cierta edad y ya aprendiste lo que tenías que aprender. Tienes que estar constantemente creciendo, tanto personal como profesionalmente. Entonces, la segunda herramienta: siempre abierto a ser un aprendiz, a tener mente de aprendiz. Siempre tienes que estar pensando que puedo aprender cosas nuevas. En el momento que dices ya no tengo nada que aprender. En ese momento, señores, vas pero para abajo y te falta mucho por aprender.

Es que cada vez que aprendo algo nuevo me doy cuenta de lo mucho que me falta por aprender. Y eso está bien, porque ahora el conocimiento es tan grande que nunca puedes aprender todo. Pero aquí yo quiero aclarar algo importante que aprender que debemos aprender y tomar esa decisión a veces puede ser abrumadora, porque las opciones son infinitas y tú dices: ¿Qué debo aprender?

Una de las cosas que yo colocaría sobre la mesa desde el puesto de líder es: entiende cuáles son todas las fortalezas y habilidades que necesita tu equipo y ahora decide quién es la mejor persona para aprender esta habilidad. Y en tu caso, tú pudieses decir: Ok, sí, aprendo una debilidad. Vamos a suponer que no me gustan los números y ahora me voy a poner a estudiar cosas que no tengan los números. Y a mí sí me gusta llamarlos debilidades porque me libera, me libera de esas. Yo soy débil en eso y ya. Entonces tú podrías decir: si yo trabajo en mi debilidad, lo único que voy a tener es una debilidad fortalecida, pero sigue siendo una debilidad.

Nunca me voy a hacer fuerte en eso, es mi debilidad. Ahora, ¿qué si debería trabajar? En mis fortalezas, fortalecer tus fortalezas, y así te haces más fuerte, tienes más alcance, más de todo esto. Y lo otro que también debes aprender es si mi debilidad me está deteniendo, pues no permitas que te detenga. Por ejemplo, eres el dueño del negocio, tienes que saber manejar los números de negocio, así no te gustan los números, tienes que saberlo porque si no sería una debilidad que te detiene. Pero trabaja principalmente en tus fortalezas.

Y otra área muy linda es trabajar en explorar nuevas cosas porque a lo mejor descubres nuevas fortalezas que ahora pueden enriquecer todo lo que estás haciendo. Entonces, debilidades siguen siendo debilidades fortalecidas, pero debilidades. Fortalezas mejoradas o explora un área nueva que a lo mejor trae nuevas fortalezas.

A mí me encanta el tema de explorar cosas nuevas, porque a veces lo que dices tú te abres y aparte que el hecho de que te abras a nuevos conocimientos, a nuevos ambientes, te saca de tu lugar de confort y eso te hace crecer, eso te expande a nuevos horizontes. Estar con gente muy diferente a donde normalmente estás, buscar temas diferentes que a lo mejor no sé si voy a meterme en una clase de baile. A lo mejor no eres muy bueno y tienes dos pies izquierdos y dices, pero te abres a nuevas experiencias y esas nuevas experiencias, lo que dices, te muestra fortalezas que a lo mejor tenías allí dormidas.

Entonces ábrete a nuevas experiencias, fortalece tus fortalezas porque ahí vas a poder brillar y aportar más. Muy importante estar consciente de tus debilidades porque sabes que tienes que buscar apoyo en eso, pero busca alianzas para no tener que, como dices tú, tener una debilidad fortalecida.

Y yo creo que abrirte a siempre estar consciente de que hay que aprender todo el tiempo. O sea, ser un estudiante perenne, ser un estudiante perenne. Y ahorita que mencionas esto me gusta la idea de que ahí es donde utilizas tu poder personal para poder trabajar fuera de tu zona de confort, porque allí es donde creces. Y dices, yo por ejemplo, no me voy a poner a hacer clases de baile, soy malísimo en eso. Y tú dices: bueno, ahí necesito mi poder personal para poder atajar mi pena, atajar esto y como me pasa, un par de cervezas y ya comienzo a bailar más o menos.

Muy bien, entonces tenemos dos herramientas. Hasta ahora tenemos el conócete a ti mismo, ten una mente de aprendiz, aprende todo el tiempo. Y la tercera herramienta es: A mí me encanta la tercera herramienta, porque nosotros nos encanta también ayudar mucho a las personas y es el tema de buscar mentores, buscar personas que están especializadas en estos temas, buscar mentores como en su momento Bladi trae hoy el semblante de John Maxwell, que es uno de nuestros mentores. Entonces siempre buscar mentores en las diferentes áreas de la vida.

Creo que es muy importante porque tú solito puedes aprender muchísimo, pero la velocidad con que aprendes, con que reflexionas, con que llegas a la final a descubrir, porque al final las respuestas. Muchas de las respuestas las tenemos nosotros mismos, pero siempre ese mentor te guía. Entonces es buscar mentores, buscar coach, buscar grupos de mentoría o grupos de desarrollo. Creo que es un punto crucial cuando quieres desarrollarte como líder y romper esa creencia de que no eres suficiente, porque cuando compartes te das cuenta que ¡wow! Los demás dicen yo quiero ser como ese líder.

De hecho, me hace recordar uno de los testimonios de uno de los líderes que estuvimos formando. Y él decía: si yo hubiese hecho este curso o esta mentoría antes, me hubiese ahorrado años de autodidacta, ¿no? Y tú dices: eso es lo que te da un mentor, te acelera. Y me encanta mucho cuando dices que el mentor saca esa respuesta dentro de ti. A lo mejor el mentor no te va a dar la respuesta porque el mentor está fuera del contexto y está bien, y el mentor no tiene que saber todo, pero el mentor debe tener la capacidad de sacar de ti lo mejor y eso lo hace a través, no dándote respuestas, sino haciéndote preguntas.

Y como líder también eres como una especie de mentor de tu equipo. Y aquí viene la clave: Pregúntale a tu equipo, más que dirigirlo, pregúntale, porque ellos son los especialistas en su tema. Ellos son los que están en las trincheras. Hacer preguntas, preguntas, preguntas, no solo direcciones. Hacer preguntas para que ellos encuentren las respuestas. Se sientan empoderados, se sienten parte de la solución y van por el asunto. Resuelven ese problema que hablábamos al inicio. Entonces tú le preguntas: ¿Y cómo resuelves esto? ¡Así, así, así, Pum! Y ahí comienzan a resolver el tema.

Así es, porque normalmente las respuestas las tenemos dentro de nosotros solamente. A veces hay que hacer también la pregunta adecuada. Entonces por eso búscate mentores de verdad, como dices tú, acelera, acelera tu crecimiento tanto personal como profesional en el área donde te quieras desarrollar, en el área espiritual siempre. Bueno, creo que antes la gente estaba muy cerrada a buscar un mentor o buscar ayuda. Yo creo que hoy en día las personas están mucho más abiertas a buscar mentorías, a buscar estos guías que te aceleran ese camino.

Bueno, el mentor te ayuda a ir más rápido y más lejos y eso es lo interesante, porque el mentor acelera todo el proceso y a veces sentimos ese de no yo soy suficiente, yo lo hago yo solo. ¿Para qué un mentor? No, yo me busco unos videos en YouTube y ya termina. ¿Pero sabes qué? Cuando hablábamos de las creencias, el mentor pues tiene la capacidad de hacerte alguna pregunta que te dice. Y ahí tengo una creencia que me está deteniendo, una frase que decía por cierto, uno de los líderes dentro de los círculos decía: ¿Cómo detecto una creencia que me bloquea? Cuando no estás tomando acción en aquello que sabes que debes tomar acción, ahí está la creencia.

Y esa pregunta no es muy difícil que te la hagas tú mismo. O a lo mejor tienes que tropezar varias veces para poderlo detectar, pero el mentor lo puede ver. ¿Por qué? Porque el mentor está fuera del sistema, está fuera de tu vida, está fuera del equipo. Entonces te hace las preguntas claves que tú dices: Ni siquiera se me había ocurrido, ni siquiera lo había previsto este escenario. Y ahí es donde se acelera todo el proceso. Por eso me encanta esto.

Así que acuérdate que te vamos a dejar en lideresagilistas.com la hoja de discusión con estas tres herramientas que traemos el día de hoy para hacer un repaso. Berna, la primera herramienta es: autoconocerse. Y la segunda: siempre atento a aprender, aprendiz toda la vida, aprendiz hasta el último día, hasta nuestro último respiro. Y la tercera: busca mentores, acelera, acelera el proceso con mentores.

Así que señores, si esta información te ha gustado, si quieres llevarla a tus equipos a reflexionar, dejamos la hoja de discusión porque semana a semana traemos estos temas para ti, para que crezcas, porque estos espacios son una pequeña muestra de lo que puede ser la mentoría, porque queremos que tú tengas éxito enorme en tu vida.

Así es, y si esta información te sirvió, te resonó o sientes que hay alguien que tiene miedo de enfrentar ese liderazgo porque siente que no es suficiente, hasta yo lo voy a dar. Mi ejemplo: como madres nos sentimos a veces que no somos suficientes para poder liderar nuestros hijos y darles, no sé, las herramientas suficientes para que sean buenos ciudadanos. Y qué es lo que todas las mamás queremos: que nuestros hijos sean buenos hombres, buenas mujeres y buenos ciudadanos. Y sientes ese miedo porque no te sientes suficiente.

Estas herramientas también son para esas mamás que son líderes de sus hogares, para esos líderes que llevan equipos de diferentes disciplinas. Si sientes que alguien necesita esta información, compártela. Y por supuesto, espera hasta el próximo episodio, porque vamos a seguir hablando de estas creencias que no te dejan. Como decía nuestro compañero, esa creencia que no te deja avanzar es donde tú sabes que tienes que avanzar. Así que nos vemos la próxima semana.