Pensamiento Alquimista

Potenciando el Cambio en tu Vida: El Poder Mental de la Síntesis | T1 / E8

León Prakash Season 1 Episode 8

Descubran cómo potenciar su vida simplificándola al máximo, en nuestra más reciente entrega de Pensamiento Alquimista. Nos hemos aventurado en las profundidades del poder de la síntesis, una herramienta esencial para filtrar el ruido constante del mundo moderno y concentrarnos en lo que realmente tiene valor. Juntos, exploraremos la mente para destilar nuestros pensamientos y avanzar hacia una existencia más consciente y alineada con nuestros objetivos más auténticos. Los secretos de vivir plenamente, despojándonos de lo superfluo y abrazando cada día con claridad y propósito, son algunos de los tesoros que compartimos en esta charla.

La introspección se revela como una llave maestra hacia la transformación personal en el siguiente segmento. Examinamos cómo el acto de mirar hacia nuestro interior puede liberarnos de las cadenas del pasado y nos permite anclar en el presente con una plenitud excepcional. Hablamos sobre la importancia de tener coherencia entre pensamiento, emoción y acción, y cómo esto impulsa cambios significativos en nuestras vidas. 

Finalmente, nos sumergimos en la esencia de superar el ego y encontrar la síntesis en nuestras vidas para abrazar la abundancia de posibilidades que nos rodean. Reflexionando sobre cómo la voz de la alma nos llama hacia nuestro propósito más profundo, invitamos a los oyentes a vivir con amor y buscar una integración de las voluntades humana y divina. La vida se despliega como una secuencia de momentos presentes, y en esta conversación íntima, destacamos por qué el aquí y ahora es el único lugar donde realmente podemos florecer y transformarnos.Únanse a nosotros en este viaje de descubrimiento y crecimiento personal.

Leon :

Bienvenidos a Pensamiento Arquimista. En el episodio del día de hoy, nuestro octavo episodio, hablaremos sobre el poder de la síntesis y como, mediante el poder de la síntesis, ser feliz, tener una vida equilibrada y plena es más sencillo de lo que creemos. El poder de la síntesis es la composición de un todo por la reunión de sus partes. La síntesis es la suma, el compendio de una materia, de alguna otra cosa. Es un proceso de obtención de un compuesto. Y cuando hablamos de nuestra mente y hablamos de la síntesis, hablamos del medio, de simplificar, de sintetizar nuestro pensamiento como una forma saludable y directa de dirigir nuestra energía, una forma más consciente de vivir mediante un método más sencillo, más pleno, más adaptado a lo práctico, al día a día, a la experiencia. El poder de la síntesis es muy importante y muy influyente en nuestra vida porque día a día, hora a hora, minuto a minuto, estamos rodeados de información, sobreestimulados por información, por cargas energéticas, por sistemas de pensamiento, por visiones distintas. Es tanta la información de la que estamos rodeados que nos cuesta atender.

Leon :

Cada vez es más difícil sostener nuestra atención, sostener nuestra energía, sostener nuestra conciencia y nuestros sentidos. Cada vez, con tanta excitación mental, con tanto alboroto mental, nos cuesta elegir y así nos cuesta dirigir nuestra concentración y nuestra atención. Tanto estímulo mental lleva a cierta distracción, a cierta desconexión de lo que realmente es fundamental, básico y principal en nuestra vida. Y de eso se trata el poder de la síntesis de encontrar, mediante una suma, mediante un resumen, mediante una integración con nosotros, una forma de establecer nuestros principios y direcciones, bases sobre las que construimos nuestra tranquilidad, nuestro bienestar, que es directamente proporcional al no tener una mente agitada, es directamente proporcional a tener una mente que está atenta al presente y también una mente dirigida por la conciencia. Simplificar, sintetizar es una forma de abstraer, es una forma de dirigir la energía y es una forma de fusionar nuestra dirección con la comprensión, con comprender cuestiones más fácil, con comunicar más fácil y con aprender más fácil. Lo cual quiere decir que, en el sentido práctico, el poder de la síntesis es aplicarnos a lo sencillo para vernos mejor dirigidos, que nuestra energía esté bien canalizada y para que nuestros propósitos están en línea con nuestra vida más práctica, porque el poder de la síntesis está asociado a lo práctico y nuestra vida debe ser práctica y sencilla más que teórica, porque el bienestar está basado en la simplicidad de las cosas bellas, en el espíritu de la tranquilidad, en el espíritu de la paz en el espíritu del que no necesita el ruido para alcanzar su bienestar.

Leon :

La ley de la síntesis es también llamada ley de la economía, y eso es debido a su otro aspecto sintetizar indica también todas las cosas que debemos ahorrarnos, que debemos evitarnos o que quizá debemos invertir tiempo, debemos invertir esfuerzo, debemos invertir una dirección, una voluntad y nuestra perseverancia para poder realizar los cambios, las mejoras que deseamos. Podemos decir que la ley de la síntesis está asociada a ese camino recto, a ese camino razonable, lógico, ese camino directo hacia nuestra voluntad, hacia lo que de verdad queremos y que está por fuera de lo que aparenta, ese camino directo también a nuestros propósitos, mediante nuestras intenciones y nuestras aspiraciones. Y la ley de la síntesis está en una relación directa, en una simbiosis con la ley de la atracción, porque la ley de la síntesis tiene que ver con nuestro grado de claridad, de organización, de graduación jerárquica, de prioridad de entendimiento y de aplicación práctica. Así que en este octavo episodio hablaremos desde la síntesis, también con un lenguaje sintético, desde el compendio, desde el resumen, desde la extracción, extraeremos de nuestra mente a modo de recuerdo, a modo de reconocimiento, utilizaremos este capítulo para conmemorar que, para tener más claridad, debemos recordar causas y efectos de los fenómenos, de las experiencias, porque cuando el ser humano, nuestro ser, encuentra la causa y el efecto de cualquier proceso, bien sea una experiencia personal o bien sea un descubrimiento científico, siempre se está respondiendo a un cuestionamiento, a una pregunta, a una pregunta sobre algo que está oculto y que se quiere conocer, sobre algo que nos está manifestando pero que se quiere manifestar como conocimiento y así como experiencia. Nosotros debemos recordar que también tenemos preguntas existenciales, que al responderlas, en esa respuesta interior, que ya se se resuelven muchos de nuestros problemas, porque de alguna manera nos devuelven a la verdadera voluntad que tenemos y nos aleja de malestares, de sufrimientos, de influencias. Cuando nos preguntamos a nosotros mismos qué o cómo es algo, en el fondo estamos encontrando la respuesta dentro de nosotros, que es donde ya es el verdadero conocimiento. No estamos buscando respuestas afuera que difícilmente podremos integrar y sintetizar. Podemos sintetizar la respuesta mediante nuestra propia pregunta, el conocimiento mediante nuestra propia aspiración y de lo que aprendemos de los demás. Es la lectura que hacemos entre líneas y que resuena en nuestro corazón, porque entendemos que es parte de una verdad interna. Cuando alguien nos habla de la mente o del corazón, la sabiduría o lo que es verdad sencillamente resuena por ser lo que es, no porque alguien no lo está regalando, es porque ya está dentro de nosotros. Nosotros debemos recordar que tenemos preguntas, todo tipo de preguntas que nos debemos, de alguna manera u otra, a cuestionamientos existenciales, porque cuando respondemos a estos cuestionamientos, en esa respuesta interior que ya se resuelven muchos de nuestros problemas Recordar nuestro poder, recordar nuestra identidad, nuestra capacidad de vivir nuestra vida plenamente, felizmente, lo mejor posible, lo más cercano al bienestar, un ecosistema de recuerdo.

Leon :

Y para recordar. Debemos hacer preguntas existenciales tales como ¿Qué es nuestra vida, ¿cuál es nuestra vida, ¿Cómo es? quién Permite recordar que nuestra vida es una experiencia humana, que nuestra vida es conciencia, una conciencia que se manifiesta a través de la cognición de nuestros sentidos, una conciencia que crea a través de su mente y comunica a través de su cuerpo que es nuestra vida, más que una experiencia presente. Y cuál es nuestra vida? sino, la vida de un ser humano, un ser humano en unas condiciones específicas, con unas capacidades que están dispuestas a ser potenciadas, a ser expandidas, con unas capacidades ocultas, otras conocidas y otras por conocerse.

Leon :

Pero sobre todo, nuestra vida humana es un misterio profundo. También es un misterio profundo manifestado. Por eso, creer que ya sabemos todo es una forma de cerrarnos a que nuestra vida es una experiencia de amplitud, de expansión, de transformación y de cambio. Y cómo es nuestra vida? Cuando empezamos en cómo es nuestra vida, vamos de vuelta a cómo vivimos, cómo decidimos, cómo atendemos, cómo elegimos quién gobierna nuestra vida. Nuestra vida es lo que los demás han querido que sea nuestra vida? es lo que yo he forjado a través de la aceptación del mundo, o la vida es lo que yo he hecho, lo mejor posible a través de mi libertad y a través de mi aceptación de mi responsabilidad?

Leon :

Estos cuestionamientos sirven para recordar que nuestra libertad siempre está presente si estamos atentos. El presente es el espíritu de la vida, que la práctica es absolutamente presente y consciente que la práctica del bienestar no es meramente teórica. Es un proceso de aplicación y la aplicación constante de esta práctica del autoconocimiento a través de recordar, de recordar nuestro poder, de recordar nuestras capacidades, de recordar lo que es principalmente nuestra necesidad y lo que constituye nuestro bienestar. Así que en este episodio seguiremos haciéndonos preguntas para recordar, para sintetizar mediante una respuesta, porque debemos recordar constantemente lo que somos, constantemente sintetizar nuestras necesidades para vivir plenamente. Esa pregunta y todas las preguntas son un camino de meditación, son un camino de autocomprensión, de autoindagación y una respuesta del corazón es la síntesis, una respuesta de quien busca conocerse a sí mismo y no vivir de acuerdo a los mandamientos del mundo. Es una respuesta libre y es una respuesta consciente. Así que vamos a recordar en este capítulo.

Leon :

Recordemos primero que todo que somos conciencia somos una conciencia habitando una mente imperceptible, una mente que es un campo energético, una mente que es un campo de información. Y también somos conciencia habitando un cuerpo, un cuerpo y su cognición, un cuerpo y sus sentidos, un cuerpo que responde a ese grado mayor en la mente, en la conciencia que gobierna la mente, gobierna la información y gobierna la dirección del movimiento y de la acción. Somos una conciencia que vive en la coherencia de que primero está el pensamiento para que luego salga la emoción y la acción. Desde el punto de vista del gobierno de nuestra energía, nosotros dirigimos la energía a través de nuestro pensamiento, nuestro sentimiento y nuestra acción y a través de el mundo, de nuestra relación con lo externo. Nosotros gobernamos nuestra energía a través de nuestro centro, a través de nuestra atención y a través de nuestra paz y nuestro silencio.

Leon :

Cuando nosotros tenemos la mirada puesta en el interior más que en el exterior, guardamos el equilibrio entre las formas que aparecen, porque ya sabemos qué es lo primordial en nuestra experiencia Y así que, como somos conciencia, también somos existenciada dentro del espacio y tiempo de nuestra, de la mente particular y también somos, en un nivel de perspectiva menor, una narrativa. Y al elegir la narrativa de la personalidad, estamos descartando el poder superior del tiempo y del espacio en la mente. Así que nuestra mente particular, la mente de cada uno, al ser un campo energético, también se comparte. Nuestra mente particular como individuos es un campo de energía, es un campo de información, es un campo de energía y información en donde nosotros tenemos la libertad de navegar. Y cómo navegamos en esa mente? a través de la atención, a través de la elección, a través del silencio, a través del perdón, porque nuestra dirección en esa mente, en esa forma de la mente, está en el contenido, está en lo que elegimos, está en lo que decidimos contener en nuestro campo vibratorio, en nuestro campo energético, en lo que aceptamos, en lo que atendemos y elegimos, aceptándolo, y en medio de esa energía, en ese espacio de la mente, sintetizando nuestras experiencias.

Leon :

El amor y el miedo son las dos energías que, en el sentido general, manejamos o conducimos. En sus diferentes versiones, en sus diferentes expresiones, el amor tiene la manifestación de la compasión, del perdón, de la justicia, de la belleza de tantos valores que nos llena. Y el miedo en general tiene manifestaciones como los celos, como la ira, como el juicio. Así que siempre estamos en ese navegar entre dos polaridades que son necesarias porque de esa fricción sale la expansión, porque desde esas zonas oscuras se produce la realización de la luz.

Leon :

El amor y el miedo son las dos formas de atención, son los dos polos de nuestra mente, son las dos formas de atención y las dos formas de elección, porque si yo atiendo de una manera amorosa, toda mi perspectiva de interpretación de lo que veo o de lo que percibo será diferente. Así yo atiendo desde el miedo. Si yo creo o elijo desde el miedo, todo lo que produzco y todo lo que dirijo será muy diferente y su efecto será muy diferente al ser manifestado. Y también debemos recordar y sintetizar lo que como seres humanos necesitamos para manifestar nuestros deseos.

Leon :

Necesitamos recordar si de verdad estamos llenos de deseos compulsivos o si hemos convertido esos deseos en propósitos de corazón, si les hemos dado realza en el corazón, si entendemos que cada propósito y que cada manifestación nuestra debe estar en un equilibrio con un ecosistema, en un equilibrio energético que debe tener un propósito siempre para mí y de intercambio para los demás Y debo preguntarme si no son esos deseos compulsivos lo que me hacen seguir sufriendo. O lo que me hace seguir sufriendo es no atender bien a lo que quiero cambiar, no atender bien y no elegir de nuevo, no perseverar en un propósito y conducir la energía. Si mi visión del sufrimiento es lo que yo dejo de hacer, el amor que dejo de darme y que dejo de percibir a cambio del miedo que me paraliza y el juicio que percibo en el mundo, debo preguntarme si lo que me hace seguir sufriendo es o parte de una ilusión en vez de una situación real, si lo que me hace seguir sufriendo es una forma de postergar lo que yo sé que debo hacer para cambiar mi situación de sufrimiento. Muchas veces la elección es seguir sufriendo, mirar hacia otro lado para no tener que afrontar mi responsabilidad de seguir paso a paso bajo un propósito. Lo que quiero cambiar y lo que me quita la fuerza y el poder, en realidad, es desatender. Desatendernos quita fuerza y poder, porque desatender es el primer nivel de la experiencia. La atención es lo que pone el acento en la experiencia y es lo que pone en primera medida el acento en las experiencias que tenemos como personas, como sistemas de creencias.

Leon :

Y si no atendemos bien a lo que está pasando y seguimos desatendiendo o distrayéndonos a voluntad, no podremos cambiar, ni transformar, ni manifestar la alquimía de lo que de verdad queremos transmutar. Para atender hay que dirigir la voluntad, hay que dirigir la concentración y si quiero cambiar algo y quiero generar una nueva manifestación, primero tengo que atender a lo que no quiero para saber lo que quiero. Difícilmente sabré lo que quiero sin conocer lo que no quiero, porque ambos son procesos que de alguna manera hacen parte de la experiencia. Normalmente, para conocer lo que se quiere de verdad y lo que es un propósito de verdad, hay que rasgar primero la apariencia, y la apariencia es lo que no se quiere, la apariencia es lo que no es práctico, la apariencia es lo que de alguna manera u otra te es, dibuja con sombras lo que de verdad queremos para nosotros. También nos quita fuerza y poder no aceptar que el cambio está dentro de nosotros, que el cambio está dentro de ti, que todos sin excepción, necesitamos de un trabajo interno, de un trabajo en nuestra mente introspectiva, para poder ver cosas nuevas manifestadas en nuestra vida.

Leon :

Todos necesitamos mirar hacia dentro para poder transformar nuestra experiencia como personas en la habitación del mundo. Todos necesitamos mirar hacia dentro para crecer en nuestra dimensión externa y para entregar mejoría y manifestación de amor al mundo. Así que por qué sigo sufriendo cuando no dobe día? de alguna manera nos cuesta sintetizar el hecho ilógico de que sigamos auto infligiéndonos sufrimiento cuando no deberíamos, de que estamos atascados en el ego mirando hacia el pasado, de que estamos atascados en el ego preocupándonos por el futuro, que no somos capaces de ver la riqueza y la abundancia del presente y que seguimos postergando nuestra culpa y así nuestro castigo. De alguna manera seguimos sufriendo porque sabemos que estamos procrastinando o que estamos malgastando habilidades, que estamos dejando pasar el tiempo de una manera distraída, de que estamos vagabundeando con nuestros verdaderos deseos, estamos malgastando habilidades para sintetizar.

Leon :

Vivimos concentrados y atentos, juzgando con la vara del prejuicio, del juicio con base en lo que no sabemos, del juicio con base en lo que no sabemos, pero que creemos. Que vivimos así, sin experimentar, cómodos únicamente con la apariencia de lo que nos brindan los sentidos, de lo que vemos, de lo que escuchamos, de lo que nos dicen. No vivimos la vida con base, no creamos nuestra perspectiva del mundo con base en lo que nos sucede, sino con lo que nos cuenta, con la información que corre sin nuestra dirección consciente y que no hemos vivido, que no hemos experimentado. Y siguiendo en la síntesis, es necesario recordar que, a través de la experiencia de nuestra vida, todo el tiempo debemos buscar la coherencia, debemos Alinear nuestro pensamiento, sentimiento y acción, sintetizarlo, convertirlo en una línea coherente.

Leon :

Debemos ahorrar y economizar en ciertas cuestiones porque, a través del conocimiento, sabemos lo que un pensamiento determinado genera como sentimiento y genera como acción. Ya conocemos sus efectos, así que sabemos sintéticamente que tenemos que ahorrarnos ese tipo de pensamientos, tenemos que ahorrarnos el atender a ese tipo de sentimientos y atender a ese tipo de pensamientos que nos traen sufrimiento. Sabemos sintéticamente que el camino de nuestras virtudes de consecución, de virtudes de expansión es lo que nos conduce a liberarnos, a sentirnos livianos con las cargas, a sentirnos libres como seres humanos. A nivel de la mente, el camino de la economía es ahorrarse sufrimiento innecesario, es ahorrarse pensamiento innecesario. Ahorrarse pensamiento innecesario para tener emociones y acciones de acuerdo a lo que deseamos. No queremos emociones y acciones innecesarias e indeseadas y para eso debemos controlar, atender bien a nuestro pensamiento, perdonar, limpiar.

Leon :

Debemos amar nuestro silencio, ahorrar en ruido, porque en el silencio nosotros podemos atender a nuestros pensamientos. En el silencio nosotros podemos escuchar, podemos aprender y en el silencio más sincero podemos hacernos preguntas, podemos respondernos, podemos hacernos preguntas al espíritu, al universo, y encontraremos la respuesta porque ya la sabemos. Todo está dentro de nosotros, ya que solo debemos preguntar y recordar. Y ahorrémonos también en desorden, en separación. Sinteticemos nuestra vida a través de la inteligencia, de la dirección de nuestra energía.

Leon :

Aceptemos el poder de nuestra voluntad, aceptemos un propósito del corazón en vez de tantos deseos caóticos, de tantos vacíos debido a la atención que ponemos al juicio que existe en el mundo, ese juicio imaginario que nos dice quién debemos ser, cómo debemos comportarnos y lo que se espera de nosotros. Porque lo que en realidad se espera de nosotros es amores, comprensiones, respeto, es todos esos valores que primero debemos darnos a nosotros mismos y comprender a través de nosotros para poder ser sinceros y comprenderlos. O porque, cuando nos ahorramos el caos y sintetizamos nuestra vida a través de la dirección más sincera del corazón, nos enfocamos en dirigir nuestra acción desde dentro, desde donde está todo nuestro poder, al químico y de cambio, desde donde está la marcha, el arranque y la perseverancia de nuestra voluntad. Podemos ahorrarnos, economizarnos el hecho de ser centros de reacción de lo externo, de ser, desde nuestras experiencias personales, reactivos a lo que viene de afuera, condicionados por lo que viene de afuera, y debíamos más bien ser centros de dirección y de voluntad que, cuando tienen que experimentar lo externo, lo discordante, recuerdan a través de su interior que son los centros de transmutación de esa energía. Y siempre, siempre, tendremos que usar la base de nuestra atención y de nuestra elección. Siempre tendremos que recordar que somos quien atiende, quien interpreta y quien lije, porque esta es la manera de recordarnos que nuestros propósitos siempre hacen parte de nuestra dirección inteligente, de nuestra conciencia. Sintetizando, nosotros debemos concentrar nuestra energía, no desatenderla. Y para concentrar nuestra energía y nuestro poder interno, no debemos desatenderla a través de nuestros juicios.

Leon :

Debemos renovarnos renovarnos a nosotros mismos y la manera en que nos vemos y que nos usgamos en nuestra autopercepción, a través del perdón. Debemos renovar también nuestra percepción del mundo. Debemos renovar constantemente cómo vemos a ese mundo para poder mirar hacia adentro. Debemos renovar las oportunidades que vemos en el mundo a través del perdón. Debemos volver a nosotros mismos como un espacio energético de oportunidades, no de carencia de abundancia, recordar toda la posibilidad que podemos abarcar con las herramientas que tenemos.

Leon :

Debemos recordar cuál es la decisión más acertera para vivir coherentemente. Debemos recordar que el camino de la verdad es el camino del presente, el de cómo pensamos y cómo sentimos en este tiempo presente, y que el camino de las ilusiones. De alguna manera es el constructo del tiempo, lo que queremos que sea o lo que no queremos que hubiese sido. La realidad es el presente, lo otro es la ilusión y el cambio solo se encuentra a través del perdón. Cada vez que nos hallamos en ese vacío del tiempo, en esa insatisfacción del tiempo, debemos, a través del perdón, retomar, renovar nuestra presencia, renovar nuestra conciencia diciendo estoy aquí presente en mi vida, en dirección y en gobierno. Así que recuerda bien lo que quieres y recuerda bien también lo que no quieres y tenlo siempre presente a través de tu atención.

Leon :

Este es un modo de síntesis porque a través de nuestras prioridades, de tus prioridades, a través de saber que tu única prioridad en tratamiento eres tú mismo, porque si no sientes amor por ti, no podrás entender ni extender el amor que le debes a los demás. El trabajo empieza por la perspectiva interna para poder ser trasladado al exterior. Por mucho que la apariencia me diga que algo que pasa está en lo externo, es lo interno de tu decisión y de tu atención lo que está condicionando lo que ves. Por eso siempre debes recordar lo que no quieres, para que desde adentro no atiendas ni elijas lo que no quieres, y nosotros, para nuestro bienestar.

Leon :

Para seguir este camino de síntesis, también hay que seguir el camino de deshacer las sombras, porque mientras esta experiencia sea humana, habrá constantes opuestos. Estará la materia, estará la mente, estará el deseo, estará el propósito, estará lo que quieres y la sensación de lo que debes. Y en esa sensación de ir deshaciendo sombras constantemente, es en la que estamos y es en la que permanecemos. Pero cuanto más hacemos el ejercicio de deshacer sombras, la luz va apareciendo más en el camino. De repente, nuestra atención y nuestra elección, como cualquier músculo de nuestro cuerpo, se va desarrollando. Cada vez nuestro círculo, nuestra protección energética se hace más fuerte, cada vez nos vemos más imperturbables, cada vez nos vemos más reforzados. Porque el camino del poder interior es un ejercicio, es una práctica que necesita de esta síntesis para que sea más comprensible, para que sea más visible y más perceptible el resultado.

Leon :

Cada vez que existen resistencias, nosotros nos expandimos. Cada vez que existen dificultades nosotros mejoramos. Así que el deshacer es de esas sombras, es sencillamente encontrar el equilibrio entre los constantes opuestos que estamos experimentando en el camino de nuestras vidas, porque en el camino de esas resistencias es donde se debe trascender sintéticamente todos sabemos los pasos que queremos dar, lo que se nos resiste a entrar y ser manifestado, pero cada uno sabe lo que quiere. Esencialmente, como seres humanos, todos necesitamos del amor, del perdón y de la voluntad, junto a un propósito para sentirnos más plenos Y por eso el ego es esta visión de síntesis, es esa cuestión que no existe pero que es un sistema de creencia casi proyectado por la atracción a la materia, por la atracción a esta experiencia humana como una cuestión material, como una cuestión de sistema de creencia. El ego es en parte esa guía que nos sirve para sintetizar lo que no queremos, porque no está de acuerdo con una plenitud.

Leon :

En el ego está y habita esa culpabilidad. En el ego habita ese estancamiento en el pasado culposo que no nos permite mirar hacia adelante y ver lo que realmente somos, la abundancia y el amor que somos, porque en el ego ese inconsciente colectivo, ese nombre que al final significa muchos estados mentales, el ego es una síntesis de ese personaje que debemos trascender, de ese apego a la personalidad, ese apego al cuerpo, ese apego a los deseos, ese apego al tiempo. El ego es lo que debemos trascender, sintetizado porque nosotros somos, no el ego, somos el corazón presente. El ego es una forma de decir lo que responde de manera baja a nuestra atención, a nuestra elección.

Leon :

Nosotros somos nuestra aspiración amorosa. Por eso el sistema del ego lo que hace es que nos regodemos en los errores, y el sistema del ego está para ser trascendido, para que nosotros no nos estacionemos en los errores nuestros ni en los errores de los demás, sino para que nos expandamos, para que mejoremos, para que nos llenemos de virtudes y aceptemos la vida como un proceso abundante. Todos estos factores de síntesis nos dicen que vivamos en el mundo, pero que seamos nosotros mismos, que tengamos nuestro mundo interno, nuestro tesoro interno, que escuchemos a la voz de nuestra alma, que es la guía de nuestro viaje, la inspiración de lo que parece ser sueños, pero que son en esencia lo que nosotros deseamos desarrollar con alas hacia un propósito, hacia algo bello dentro de lo humano, algo que deseamos compartir con amor y debemos convertir a nuestro amor, convertir al amor esencial en nuestra forma de atender y elegir con nosotros, para nosotros y para nuestros semejantes.

Leon :

Debemos elegir al perdón como nuestra forma de restituirnos, de renovarnos, de regalarnos, y debemos elegir el camino de buscar la grandiosidad de la experiencia humana, el regalo de la experiencia humana, y mezclarlo con la experiencia divina bajo los mismos pasos. Juntar la voluntad divina y la humana dentro de un propósito, de alguna manera, sintetizando y haciendo un resumen para cambiar, para mejorar, para dirigir nuestra energía. Nosotros debemos abrir nuestra mente, enfocarnos hacia la mente, hacia la introspección, hacia la experiencia de la vida que pasa por nosotros y en nosotros, ahora, en este presente, porque todo lo que quieras cambiar, todo lo que quieras transmutar a través de tu alquimia siempre comienza ahora, en este presente convencido, convencida de que seguir la voluntad de nuestra alma, conectada a nuestro corazón, es lo que nos llenará, en lo que no buscaremos únicamente el resultado sino que hemos entendido que la experiencia y el propósito es lo que nos sostiene. Así que comparte sintéticamente y sé justo, compasivo, para que vivas y vivas la mejor cara del mundo. Simplemente sintetizando, dirige tu vida, detente y a silencio. Pregúntate para que encuentres la respuesta que hay dentro de ti, porque tú eres tu propio maestro y tú eres tu guru.

Leon :

Tus semejantes y tus hermanos hacen parte de ti, dentro de la fuente y debes atender a tu amor, a su amor, y compartir lo mejor de ti de manera compasiva y amorosa, no vivir según las reglas de un mundo dividido y de un sistema inconsciente del cual solo hace participe el miedo. Decide aceptar y hacerte responsable de tú, a través de ti, de tu plenitud en el presente. La enguardia, atento a las distracciones, sintetiza y deja atrás las ilusiones y el miedo, porque serás libre únicamente a través del poder de la síntesis. Si recuerdas la libertad que hay en ti, la libertad de atender y, sobre todo, la libertad de elegir nuevamente. Vive del presente vivo y no de la acción de las ilusiones. Y recordemos que no existen las casualidades, solo causalidades. Recordemos que la causa y el efecto existe, que no somos automatas, que hay causas y efectos en todo, que cuando conoces la causa de algo, entiendes el efecto y cuando cambias la causa de algo, cambias el efecto. Recordemos que si seguimos eligiendo lo que no queremos, seguiremos viendo manifestado lo que no queremos.

Leon :

La coherencia es cuando nuestro pensamiento como causa y la acción como efecto está alineada. Nosotros nos fortalecemos desde la raíz, desde el pensamiento, desde el conocimiento y el autoconocimiento de nuestra mente, desde reconocer nuestros puntos débiles y trabajar en ellos, desde la aspiración de ser una versión mejorada de nosotros mismos y del reconocimiento que lo que deseamos es una mente tranquila, una mente apasiguada, una mente en paz, de que debemos atender a que el lenguaje de la coherencia es el amor y que el lenguaje de la incoherencia es el miedo, que el miedo existe. Sin embargo, para que rompamos esa barrera y esa resistencia y podamos percibir toda nuestra potencialidad porque el mundo es una creación abstracta pero nosotros somos una realidad presente cada individuo, cada uno de nosotros debe aspirar a elevarse como prueba de amor, a elevar su inteligencia como prueba de amor a sí mismo y a ser manifestada con su sumejante. Así que sinteticemos y observemos lo que haya abundante, no nos concentremos en la apariencia de carencia, no nos concentremos en los juicios, en las comparaciones.

Leon :

Si queremos algo y deseamos algo de corazón, convirtámoslo en un propósito. Trabajemos todas las líneas de nuestra decisión al unísono, desde la mente, el corazón y la acción de nuestro cuerpo. Si queremos sentirnos mejor en algo, busquemos las causas que debemos seguir para encontrar esos efectos. Creamos en nuestra mente, vivamos en lo mejor de nuestra mente Y ahorremos nos toda esa envoltura en sufrimiento, en culpa, en creencias innecesaria. Ahorremos la sensación de malestar, libremos de ilusiones y aferrimonos a lo verdadero, a lo que nos dirige a la plenitud.

Leon :

Practiquemos nuestro poder interno, aceptemos nuestro poder interno y nuestra responsabilidad para poder conseguir el cambio y la liberación de las cargas que queremos desplazar de nuestras vidas. No vivamos como jueces sino que vivamos como autores de nuestra realidad. Vivamos con la mirada de dentro hacia afuera y no de afuera hacia dentro. Vivamos como personas, como seres libres y no como condicionados, como esclavos por la situación externa. Tengamos el valor y el coraje de experimentar nuestros deseos, nuestra verdadera voluntad y no posterguemos nuestro cambio. No aceptemos el sufrimiento que tiene el precio de no dirigir nuestra energía Y la síntesis.

Leon :

Para qué el poder de la síntesis? para ascender al bienestar con base en una dirección, para usar nuestra memoria al servicio del presente, para que nuestra memoria y nuestro compendio, nuestro argumento de vida, sea todo lo que necesitamos recordar en este momento recordar que somos mente y que la mente es la causa mayor de lo que sucede con nuestro cuerpo. Que en la mente está la toma de decisiones, está la toma de elecciones, que la conciencia es ese testimonio omnipresente de nuestra vida, de nuestras acciones, de nuestros pensamientos, de nuestros sentimientos, de nuestra relación con nuestra fuente creadora, con nuestra fuente de energía, con nuestro origen, con nuestro todo. Y somos sintéticamente uno, uno en el presente, cambiando, actuando, viviendo, eligiendo el sentimiento, eligiendo el pensamiento y la aspiración. Y la memoria es nuestra vida.

Leon :

Para hacerla más fácil, para poder tomar una decisión determinada en dirección a la mejoría, a resplandecer, usemos nuestra capacidad de viajar a nuestra mente, de viajar hacia adentro. Utilicemos la maravilla de crear desde adentro hacia afuera nuestra mejor versión de nosotros mismos, nuestra mejor forma de estar conectados con todos los sucesos, de sentir que nuestra presencia es una, que sentir que lo que elegimos es este tiempo de existencia en paz, en quietud, en armonía, de que, ante el impulso, ante el ruido y ante el juicio, nosotros recordamos, recordamos que somos el centro y al recordar que somos el centro, aplicamos la luz, la luz de la verdad, del otra, sendente que es lo que llevamos dentro y estamos dispuestos a manifestar en el exterior. Estamos dispuestos a vivir la vida con una voluntad plena, con un agradecimiento y con una percepción basada en la abundancia, porque la abundancia nos da las herramientas para la expansión, mientras que la visión de carencia nos acerca al miedo, a la parálisis y a detener el cambio. Y sinteticemos que durante toda nuestra vida, durante nuestra existencia temporal y con nuestra conciencia humana, siempre estaremos haciendo la práctica, siempre permaneceremos en la intención de adquirir mayor conciencia de adaptarnos y mejorar en nuestro tiempo presente, porque ese es el sentido de este viaje, es adquirir la visión del amor que vence a la apariencia.

Leon :

Nuestra síntesis es presente, es experiencia presente. Todo nuestro cambio posible es en el presente. Todo deseo que se convierte en propósito ocurre en este presente. Toda experiencia de cambio es en este presente. Toda la energía que fluye fluye en este presente. Somos experiencia presente. Somos navegantes de la mente, navegantes de la experiencia en la mente. Y mientras este tiempo tenga duración, nosotros tenemos que elegir, tenemos que tomar decisiones, tomar una perspectiva de un camino y ser consistentes, ser perseverantes, ser constantes y derribar en cada presente, en cada paso, la máscara de la apariencia, encontrando que el verdadero poder, que la verdadera libertad, que la buena aventura está en todo el poder interior que albergamos, que desde dentro conectamos con todo el universo al completo.