
Soberanía Consciente
Anteriormente conocido como The Beyond Resilience Life, Soberanía Consciente es una evolución que nace para acompañarte en un viaje más profundo hacia tu verdadera esencia. Este espacio está dedicado a quienes desean soltar las máscaras que los desconectan de sí mismos, integrar el equilibrio entre las energías femenina y masculina, y vivir una vida vibrante, auténtica y plena. A través de reflexiones profundas, herramientas prácticas y conversaciones transformadoras, exploraremos cómo liberar patrones limitantes y recuperar tu soberanía interna. Aquí, la autenticidad y el sentirte vivo se convierten en tu nueva forma de habitar el mundo.
Soberanía Consciente
117 - La historia Detrás de Mi Libro
🎙 Resumen
En este episodio, la Dra. Lydiana García nos abre su corazón para compartir el inicio de una serie especial de 10 episodios dedicados a su libro Transforma tu Herida Materna. Nos lleva a un recorrido íntimo por su camino como psicóloga y madre, explorando cómo las heridas maternas se manifiestan en la maternidad y cómo su propio proceso de sanación la llevó a escribir este libro.
Desde su formación académica hasta las experiencias personales que la transformaron, Lydiana entrelaza su historia con sabiduría, vulnerabilidad y propósito, invitándonos a reflexionar sobre cómo nuestras heridas también pueden ser portales hacia una vida más plena y auténtica.
✨ Reflexiones que nos deja:
🔹 La maternidad puede reactivar heridas no sanadas de la infancia.
🔹 La psicología no lo es todo: el juego, la conexión y la honestidad también sanan.
🔹 Escribir el libro fue un llamado del alma, no un logro profesional más.
🔹 Hablar desde la experiencia personal transforma tanto a quien escucha como a quien comparte.
🔑 Aprendizajes Clave
- Las heridas maternas impactan profundamente la forma en que ejercemos la maternidad.
- Sanar implica buscar ayuda, reflexionar y también escribir nuestra historia.
- La conexión madre-hija es un pilar esencial en cualquier proceso de sanación.
- Lydiana combina su formación académica con su camino espiritual y emocional.
- La psicología puede ser amorosa, juguetona y profunda a la vez.
- Sentirnos inadecuadas puede ser el portal hacia nuestra verdad.
- Este libro fue más una canalización que un proyecto profesional: "me eligió".
⏳ Chapters
📌 00:00 Introducción a la serie de episodios
📌 01:01 Formación y trayectoria profesional de Lydiana
📌 04:09 Trabajo con adolescentes y sus familias
📌 10:50 Experiencias personales como madre
📌 16:20 Exploración de la herida materna
📌 28:13 El proceso de escribir un libro sobre la herida materna
🌿 Conecta con Lydiana García
📲 Instagram: @soylydianagarcia
🎧 Podcast: Soberanía Consciente
📖 Libro: Transforma tu Herida Materna (Mayo 2025)
🌍 Retiro “Reclaiming Our Voice and Roots” en Puerto Rico – Junio 2025
💌 Únete a mi grupo exclusivo de WhatsApp
Si este episodio resonó contigo, quiero invitarte a un espacio más íntimo: un grupo exclusivo de WhatsApp donde compartiré reflexiones, audios y contenido detrás de cámaras sobre la creación de mi libro. Solo para quienes quieran ir más profundo en es
🌿 Conecta con Lydiana García
📲 Instagram: @soylydianagarcia
website: www.lydianagarcia.com
📖 Libro: Transforma tu Herida Materna
🌍 Retiro “Reclaiming Our Voice and Roots” en Puerto Rico – Junio 2025
💡 Reserva tu Sesión de Claridad Divina Si estás en un momento de transición o confusión en tu camino de sanación, la Sesión de Claridad Divina puede ayudarte a reconectar con tu sabiduría interna y recibir guía clara para tu próximo paso.
🔮 Reserva tu sesión aquí: Sesiones de Claridad Divina
📩 ¿Ya estás en mi lista de correos? Recibe reflexiones exclusivas, herramientas de sanación y actualizaciones sobre mis espacios de transformación directamente en tu bandeja de entrada.
🔗 Únete aquí: Suscríbete a mi lista de correos
✨ Si este episodio te tocó el alma, compártelo con alguien que lo necesite y deja una reseña de ⭐⭐⭐⭐⭐ en tu plataforma favorita. 💛
Lydiana Garcia (00:02.574)
Como están todos y todas, muchas gracias por sintonizar este otro episodio. Hoy le quiero contar que voy a hacer una serie de 10 episodios, comenzando con este, para contarles toda la historia detrás del libro y hablarle un poquito más. Estamos en este proceso, como yo diría, en el mes 8 de mi embarazo con mi libro, se lo ponemos de esa manera y sale en mayo, sale para México y para Centroamérica y luego entonces para Estados Unidos un poco más tarde.
Pero quiero contarles, quiero disfrutarme de este proceso y quiero llevarlos a este recorrido de hablar de este tema, que no solamente contarles historias, sino también darle un poquito de información sobre este tema de las heridas maternas, cómo nos afectan, cómo nos impactan, cómo me han impactado a mí. Así que eso va a ser parte de estos próximos 10 episodios. Este de hoy, voy a contarles el origen, dónde inició todo. Así que eso lo que esperan en el día de hoy.
Y aquí voy a comenzar hablando de mi formación. Soy psicóloga, doctora en psicología, porque sé que en Estados Unidos es diferente la formación de psicóloga de América Latina, así que aclaro eso. Para Estados Unidos y Puerto Rico es parte de Estados Unidos. Mi educación incluyó unos cuatro años en la universidad, luego de haber cumplido mi certificado de high school, que sería la prepa, creo.
para algunos países o la secundaria para otros. Luego de eso en la universidad, sea, ya tenía 18 o 17 años, ahí hice cuatro años que son los años básicos que le llaman el bachillerato. Y en esos cuatro años estudié, lo hice en concentración de ciencias sociales en psicología. Luego de eso, con eso uno no puede ser psicóloga en Puerto Rico ni en Estados Unidos. Con eso puede ser, aunque tienes cuatro años que estudiaste psicología y conoces todas las bases.
es más bien te puede ayudar para hacer otras cosas, no para psicóloga, para ser trabaja... case manager, manejadora de casos, cosas así de apoyo, pero no para dar terapia. Luego de eso entonces hice un programa que era de cinco años, que va de sebachillerato, del VA, al PhD, al doctorado en filosofía y en psicología, o sea, se llama así, pero es un doctorado.
Lydiana Garcia (02:24.992)
Y entonces ahí hice ese programa que técnicamente completa lo que en Estados Unidos sería maestría y doctorado juntos. Fueron cinco años que parte de eso el último año fue completamente práctica, le llaman el internado doctoral, por eso fue que me fui para Estados Unidos, ese fue el que hice en Los Ángeles. Cuando yo estaba estudiando, o sea, hice nueve años de carrera luego de graduarme de high school.
Cuando yo estaba estudiando desde el principio, desde que tenía 18, 19 años, a mí me gustaba trabajar con este tema de prevención, me gustaba hablar con todo esto que tenía que ver con la resiliencia, los factores de riesgo, cómo ayudar, por qué las personas toman diferentes acciones, me gustaba integrar lo que es la creatividad. Yo me veía haciendo muchas cosas, me río porque tenía a mis compañeros de la universidad que se reían conmigo que decía, no.
yo quiero dar clases, yo quiero tener un centro para ayudar a las personas, a dar charlas, aparte de la terapia, yo nunca me vi para hacer simplemente dar terapia uno a uno. El rumbo de la vida te lleva por lugares misteriosos, Y cuando me fui para Los Ángeles y en mi formación yo siempre me veía trabajando con adolescentes, amaba trabajar con la juventud.
No niño-niño, pero uno no puede necesariamente ser especialista de adolescente. Entonces la formación es para niños y adolescentes juntas. Y ahí me formé de esa manera. Mis prácticas las hice con jóvenes y adolescentes. Y entonces, cuando me fui para Los Ángeles, me fui para un internado doctoral a hacer la práctica ya más de lleno, trabajando con niños y adolescentes.
Mientras estaba trabajando con niños y adolescentes, lo más que me gustaban, los más que me gustaban trabajar eran esos que le llamaban rebeldes, esos que le llamaban que nadie les podía entender, esos que se rebelaban contra sus padres, tomaban acciones peligrosas o de riesgo, eso, eso eran los que a mí me gustaban, los que contestaban, los que estaban así vivos, eran... a mí me fascinaba. Y una de las cosas que más me gustaba era ganarme la confianza con ellos.
Lydiana Garcia (04:39.118)
y me la ganaba jugando juegos de mesa, hubo uno que le enseñé a jugar poker, claro, sin apostar, pero le enseñaba a jugar de poker, con arte, de diversas maneras. Pero lo más que me gustaba, aparte de ganarme eso, era poder ayudarles a reconectar con sus padres, mayormente con las madres, porque era la que venía a consulta, mucha de la gente que yo veía, los padres no estaban involucrados.
Sé que las cosas no necesariamente son así para todo el mundo, pero era lo que yo vi. Y en poder lograr que ellos mejoraran esa relación con su madre, porque en parte lo que yo veía era que era un llamado de atención. Muchos de estos jóvenes estaban desesperados, estaban pidiendo a gritos a través de sus acciones que la mamá y en el caso que papá estuviera presente, papá les mirara.
les viera, les escuchara, les dieran cariño, les hicieran sentir que ellos tienen valor. Pero no lo van a decir de esa manera. Lo hacían de acciones. Y me río pensando las diferentes cosas que ellos decían conmigo y que cuando hacíamos sesiones de familia, o mayormente mamá e hijo, hija, salían esas cosas. Y yo podía decirle, como decimos en Puerto Rico, bien right through, le podía decir como que, perate.
le dijiste que no ibas a hacer eso, pero que en verdad era lo que querías, lo que quería era que tu mamá te escuchara porque sientes que tu mamá no te entiende, sientes que tu mamá te rechaza, sientes que tu mamá no aprueba de las cosas que te estás vistiendo, de tus intereses y haces esas cosas, le contestas, le gritas, le tiras la puerta para tratar de ver si tu mamá toma acción, pero cuando mamá, y aquí de nuevo voy a hablar mamá pero puede ser papá, los ignoraba o decía pues yo no puedo trabajar con eso.
se cumplía esa idea que ellos tenían de mamá, yo no le importo a mamá. Entonces poder llegar a esa raíz y trabajar con estas familias que trabajé, estas unidades entre mamá e hijo, eran mis favoritas. A tal punto que todavía guardo una figurita que me regaló una cliente adolescente que tenía 16 años en ese momento, 15 creo que tenía 15, con su mamá. Y esa era una relación tan...
Lydiana Garcia (07:05.238)
para mí era bonita, la mamá era desesperante. Yo también conectaba con las mamás, aunque en ese momento yo no era mamá. Por siete años yo trabajé como psicóloga sin ser mamá todavía, pero yo relacionaba con ellos y yo les escuchaba, yo hacía sesiones con ellos y yo no venía con esa cosa de tienes que ser así. Yo buscaba entenderles y ver cómo podía complementarlos. También hubo un supervisor y supervisores que me ayudaron a ver esa otra mirada.
para no estar completamente 100 % del lado del menor porque también es importante ver si mamá está bien, los hijos van a estar bien. Si mamá se siente capaz de ser mamá, eso va a ayudar la capacidad. Yo también tenía reuniones con ellas a solas y si habían papás, pues los involucraba para ayudarle a la destreza de crear esa confianza de poder criar a sus adolescentes. Así que de ahí comienza mi trabajo, trabajando con adolescentes, trabajando con...
esa unidad mamá e hijo y buscando manera de ayudar otra cosa que amaba, amaba hacer era jugar juegos de mesa con ellos primero que nada a mí me fascina jugar juegos de mesa, soy muy competitiva y algo que muy interesante en mi casa casi nunca jugaban conmigo y con mi hermana pero mi hermana y a mí nos fascinaba jugar juegos de mesa y para navidades lo que pedíamos era esos juegos de mesa, o cuando ya estábamos más grandes luego de las muñecas y
era tan interesante para mí y hubo un supervisor también espectacular que tuve, que trabajaban con adolescentes, que buscábamos, nos enseñaron juegos que no involucraba conocimiento ni nada complicado porque muchas de las mamás con las que yo trabajaba pues ellas tenían mucho trabajo, algunas tenían dos, tres trabajos para poder sustentar financieramente a sus hijos y poder verles reír, jugar, conectar, nunca me voy a olvidar de...
había una relación madre-hijo que ellos nunca hablaban. El niño estaba en esa fase, 12, 13 años, era bien, yo no quiero hablar con mi mamá. Tenía mucho coraje por situaciones que pasan en Estados Unidos, en que los papás tienen que dejar a sus hijos en su país de origen para poder emigrar y luego entonces los van a buscar. Y esa separación le dolió. Y la persona, o este joven era muy así, como muy no, no, no, no,
Lydiana Garcia (09:29.6)
cuando traje un juego de mesa que no involucraba hablar, el que tiene que ver Spot It, que es de que tú miras y tienes que, bueno, no lo voy a describir, lo pongo en link, lo pondré o se lo buscan, Spot It. Y todo riéndose, todo gozando, todo conectando. A también a la mamá le ayudó darle eso como esa confianza de sentirse adecuada porque ella se sentía tan poco adecuada de criar a sus hijos.
estaba pasando de que estaban esos hijos al punto de que ya no querían hablar español entonces ella no hablaba inglés, ellos no hablaban nada o decían que no hablaban nada de español y ya no podían comunicarse con nada así que traerles estos juegos de mesa que ellos podían conectar, volver a reírse, volver a ser una unidad la mamá sentirse adecuada, tener momentos tranquilos que no son todos sobre los problemas y verlos a ellos reír yo me lo disfrutaba
grandísimamente y de esa manera si vemos de un punto psicológico aumentaba y ayudaba a que ellos conectaran y crearan esa relación entre madre e hijos más fuerte así que ahí comenzó todo y como les dije miraba a esas mamás desde un lado compasivo me costó porque al principio cuando empecé definitivamente empecé más bien desde
desde el lado del joven, del menor, como que no, tienes que ser. Pero cuando me ayudaron con mis supervisores a poder ver y verte desde el lado más compasivo a mamá, tratar de entenderla, de escucharle, porque no podía comprender en ese momento, no era mamá. Y hay cosas que, honestamente, mi experiencia es hasta que uno no lo es, uno no lo puede entender. Entonces yo trataba de escucharle.
de ponerme en su lugar, de entenderles y de mirarles y hablarles de ese lado compasivo. No desde, tienes que hacerlo así, allá, tratar de ver cuáles son las cosas que se interponen y cómo ayudarles a darles destrezas también para aumentar su confianza, darles destrezas de crianza, de comunicación y de diferentes cosas para también ellas mantenerse.
Lydiana Garcia (11:41.046)
siendo en parte la autoridad porque muchas de ellas perdían por completo y entonces los hijos no les respetaban y no desde la autoridad así de que yo mando aquí todo lo que se hace pero que se ponga, se haya una diferenciación y que ellas se sientan capaces de poder hacerlo.
Como les dije, yo no era mamá en ese momento por siete años, cuando me convertí en mamá, pues llevo siete años trabajando, ya como psicóloga, trabajando y antes de eso pues cuando estaba en la universidad pues hacia las prácticas. Eso yo decía, yo soy psicóloga de niños y adolescentes, o sea, yo tomé curso de parto, porque de parto yo no había parido, pero yo no tomé curso esos de cambiar el pañal.
de crianza yo decía pa que si yo soy experta en esto y yo me crié cuidando primas o cambié pañales mis hijos no fueron los primeros que yo cambie pañales que aunque suene raro hay mucha gente hoy día que sus hijos son los primeros que ellos cambian pañales los míos no fueron yo había ya cambiado pañales había cuidado había dormido niños había dado leche a mis primas y yo me sentía uh! aquí yo puedo con todo hasta que pum!
y te lo juro que esas últimas horas antes de yo tuve a mi hijo en mi casa en una piscina dentro de la casa y toda la cosa te lo juro que todo estuvo bien hasta el momento que nació que de momento yo lo veo y me entró como y ahora que entonces era como esa fue fue una lucha interna porque
mucha gente habla de ese momento tan especial y no es que no haya sido especial pero a la misma vez a mi
Lydiana Garcia (13:28.622)
me vino como esta nube de, ajá, ¿y ahora qué hago? ¿Cómo es que... Como... O sea, cuando la gente piensa, ¿y con qué se come esto? O sea, era, ¿y ahora qué hago? Me sentí tan, y tan, y tan inadecuada. Me sentí que no tenía idea de cómo darle leche a mi hijo, cómo cuidarle, cómo cambiarle el pañal. Me sentí con tanto miedo de esa responsabilidad tan grande de un ser humano.
Y mi hijo desde pequeño, probablemente por problemas de cómo fue el parto y todo, él no podía acostarse de espalda. Entonces yo fui de la generación, que aunque mis papás, pediatras recomendaban acostarlos en la barriga, mi generación era de no, tienes que acostarlos de espalda y ponerles, envolverlos, el suaro, porque si no se te puede morir. O sea, era todo eso. Y el niño...
de espalda no quería no no no no no bueno que lo llevé a quiropráctico y hizo otras cosas pero entonces desde el principio ya las cosas que me estaban diciendo cómo hacerla con él no encajaban y cuando no encajaban era porque era porque se quejaba bien fuerte lloraba un montón y me sentí súper inadecuada luego entonces me dio una mastitis y cuando me dio la mastitis a las dos tres semanas yo no podía
en ese momento, o sea, yo estaba con una fiebre, parecía la influenza, el flu. Y esa separación que tuve que tener, que alguien más, que en ese caso mi mamá, mi suegra, mi tía, creo que estaba todavía, ellos tuvieron que encargarse de mi hijo y me lo traían para el lecho, yo me sacaba, no me recuerdo ya ni qué pasó ahí. Yo dije, aquí pasa algo. Y ahí fue que entonces empecé a poner tres y dos unos de historia de cuando yo era pequeña, que cuando yo nací hubo una separación.
entre mi mamá y yo porque tenían un viaje programado, de eso le habló más en el libro pero anyway lo importante, no importante los detalles del viaje, lo importante es que hubo una separación que fue corta y que mi mamá también con su mamá cuando fue pequeña tuvo otra separación, ella fue por casa unas causas médicas que estuvo muy malita y cerca de la muerte cuando estaba recién nacida y entonces a ellos dije wow y empezó a revolcarse
Lydiana Garcia (15:51.498)
diferentes cosas, cosas que se seguían repitiendo, claro de manera diferente, pero se seguían repitiendo. Y decía, qué interesante. Y empecé entonces, pero son cosas que no necesariamente tenía la confianza de preguntarle a mi mamá cómo te sentiste conmigo, pero que ella quiso decir, sea, escuché hablar que se sintió muy mal por esa separación y eso todavía le causaba llanto. Y dije, aquí hay algo. Y poco a poco empecé a explorar lo que ahora puedo ver como mi herida materna.
se activó grandísimamente cuando me convertí en mamá porque empecé entonces a sentir lo que yo no sentí Empecé yo a sentir en mi cuerpo, fue como se activaron estos centros de duelo, de tristeza, de sentirme que no tuve y cuando tú estás criando un bebé y estás pendiente al bebé y tienes que darle leche, tienes que hacer esto
En mi caso, no me dieron leche materna por poco tiempo. En ese viaje se cortó y luego entonces fue Fórmula. Claro, era una época diferente, era la época de Fórmula. Pero entonces, yo todas las cosas, entonces era, oh, wow, yo no recibía esto. Entonces, mientras tú estás criando un hijo, tú estás también conectando con esa niña anterior y con las cosas que tú no recibiste. Y empiezan a activarse unas cosas que yo nada más puedo decirles que es a través de la experiencia.
Y ahí yo empecé a notar, tuve que buscar ayuda, busqué ayuda psicológica. Tuve dos años aproximadamente con una terapéutica que se especializa en la parte somática, que me ayudaba a mí, también a mi hijo. Mi hijo también estaba mostrando unos movimientos que estaba como procesando cosas que probablemente eran del parto. El parto mío fue muy largo con él. Para gente diría normal, viéndolo ahora parece que había algo que estaba impidiendo que progresara.
que él bajara, no se estaba acomodando bien y parece que le dolía y otras cosas que venían energéticamente de nuestro linaje. Y entonces ahí yo dije, ok, está interesante, busqué ayuda, me orienté, empecé a hacer trabajo a un poco de niña interior y seguían saliendo heridas, mientras iba creando a mi hijo seguían saliendo heridas y que sigan saliendo, él va a cumplir 10 años este año, se llevó casi 10 años como mamá.
Lydiana Garcia (18:07.296)
y siguen saliendo. voy a aventurarme a la adolescencia, vamos a ver cómo es eso. Todos los años que trabajé con adolescente vamos a ver cómo es eso. Pasando el tiempo, yo estaba en... era la... Bachelorette, la... como una fiesta de despedida de soltera de mi hermana, pero ella lo coordinó, sea, las amigas lo coordinaron más bien un fin de semana. Fin de semana que nos fuimos a quedar a un lugar...
Yo me fui a quedar más que un día, creo, porque estaba pues con un niño chiquito y qué sé yo. Y cuando fuimos, parte de eso fue parar en un cafecito y había al lado una tienda de arroz. yo dije, déjame entrar, a mí me gusta entrar a lo que estaban tardando. Y yo dije, déjame entrar. Cuando entré, pasé y vi una figurita de mamá e hija.
Lydiana Garcia (19:17.298)
Es aquí la figurita de la mamá e hija africana. Voy a ponerla más cerca a la cámara con todas estas simbologías hermosas. Los cristalitos, las prendas, las pantallas, los aretes. Y cuando yo lo vi, me conmovió un montón. A tal punto de que yo dije, yo me lo tengo que llevar. No sé cómo.
pero yo me lo tengo, por lo menos no estaba viajando, no era avión pero yo dije yo me lo tengo que llevar y yo sentí que esa figura me llamó y esto fue en el 2000, si no me equivoco fue creo que 2000, bueno ahora, no sé ahora mismo fueron como dos años antes, yo creo que fue como el 2019, 2018 y...
No, fue después de mi hermana. Anyway, el punto es que yo me la llevé. Sí, fue después de mi hija, 2020. Por ahí 2021. Y yo me la llevé, la envolví para el carro, me la llevé y me fui con ella, me fui tranquilita y la figurita la puse en mi altar, en mi oficina donde vivíamos. Por eso digo, fue después del 2020. Y entonces mientras yo tenía la figurita...
Yo estaba en ese momento conectando mucho con cacao y hacía muchas prácticas de cacao sola. Me tomaba mi cacao, me sentaba al frente de mi altar, prendía mis velitas y miraba la figurita. Y yo sentía que la figurita era como... No me hablar, no es que yo escucho desde que ella me dice unas cosas, pero yo sentía que esa figurita me estaba recordando a mí volver a trabajar con la conexión madre-hija. Y ya en ese momento ya yo no estaba trabajando mayormente con adolescentes, trabajo en la oficina mayormente con adultos.
Pero algo me decía como que algún día voy a volver a trabajar con madres e hijos. De alguna manera, haciendo un retiro. Parte de mi formación también incluyó cosas que tomé adyacente a como psicóloga. Yo tomé un curso por un año para ser facilitadora de retiros y de programas, talleres para adolescentes y para sus papás. Entonces, amaba todo ese tipo de trabajo. Yo miraba la figurita y yo decía, algún día, pero aquí estás. La pongo con la intención.
Lydiana Garcia (21:38.894)
Pasaron los años, me mudo para Florida y cuando me voy a mudar para Florida de California, que en Los Ángeles yo lo amé y todavía lo amo, yo sabía que la transición iba a ser fuerte pero que era necesaria. Y yo dije, no quiero llegar porque yo tuve una transición antes de eso, que nos mudamos a Puerto Rico un tiempo y se me hizo muy difícil el duelo de estar en un lugar que no quería estar.
Y yo dije, yo voy a hacer una transición, lo mejor que yo pueda, con la intención, con todo lo que aprendido, espiritual y todo. Y mi amiga Rocío, que trabaja su handle en Instagram, es Water Healing. Ella hace unos eventos a través de las diferentes fechas, como equinoccio, solsticio. Y ese 2022, ese verano, tenía un evento para el solsticio de verano. No recuerdo si fue el 21, 22, 23. Era muy cerca, un sábado.
y era bien temprano, que estar antes del amanecer, como a las 5 o algo así, 5 y media de la mañana. No recuerdo ahora. Y yo dije, yo tengo que ir porque allí, en la playa, a utilizar eso con la intención de despedirme y primero agradecer a Los Ángeles que me dio toda la formación, me dio los años de práctica y fue que yo prácticamente me formé, aunque yo venía con la educación de Puerto Rico y fue donde me formé con la práctica.
como psicólogas y darle las gracias a la tierra, a los custodios de la tierra, los indígenas, las personas, a las energías, a la naturaleza, por todos estos años que fueron más de 12 años de vivir allí. Y hacer una transición. Rocío me dice, no, perfecto. Entonces allí, en ese evento que fue hermosísimo en la playa, fueron diferentes personas, incluyendo a esta gran mujer, Ana Flores.
y Paula Durán, si no me equivoco la apellida, que también la conocí. entonces ellas, Paula me dijo, hey, vamos a ir a almorzar, a desayunar luego del evento. Si quieres, vente con nosotros. Y yo dije, perfecto. Fui para allá, estábamos compartiendo con Ana, con Paula, con Rocío, si no me equivoco había otra persona. Y allí...
Lydiana Garcia (23:58.846)
estamos hablando de las cosas que queremos, de mi imudanza, bla bla bla y ellas me dicen mira tenemos contacto con las chicas de Se Regalan Dudas con la productora o la persona que le maneja y están buscando personas para entrevistar creo que sería muy bueno que te entrevistarías antes de que te vayas porque va a ser en Los Ángeles y yo bueno pues perfecto la cosa es que me conectan con las chicas de Se Regalan Dudas y se da se da como dos semanas antes de yo viajar ya mi casa estaba
la mitad empacada, hará un caos. Voy al episodio que hablamos sobre el Burnout. Hacemos el episodio en la casa de una de ellas, todo chévere. El episodio sale en agosto. Ya yo estaba en Florida. Llega diciembre y en ese agosto yo empecé a tomar un curso de constelaciones familiares y en ese curso incluía
semanalmente teníamos que estar, yo le decía como terapia grupal, ella le llamaban las mentes maestras porque era como un mind, anyway, era como un mastermind, pero para mí era como una terapia grupal, intensa, porque las dos facilitadoras, yo venía, cada semana veníamos en el grupito, traíamos un tema, y van directo a la raíz y fuertecito las cosas, había veces que yo decía, yo no quiero hablar de nada, no tengo nada, y salía algo.
o una compañera traía un tema y me revolcaba el mío. Fue un año, ese 2022, 2023 fue un año de muchas de abrir los ojos y fue de explorar todo esto de las constelaciones, también los fines de semana teníamos un fin de semana al mes teníamos el curso, el taller más y más lo sábado y domingo, perdón sábado. La cosa es que, y ese curso era más intencionado primero para que uno haga el trabajo individual,
y luego si querías hacía la formación. Yo estaba en eso y empezó a revolcarse cosas que tenían que ver con la herida materna, con tomar a la madre, como la madre es la fuerza de vida en términos de la abundancia, el éxito, el dinero, entonces el padre es más como esa fuerza, la disciplina, hay muchas cosas ahí. Y yo estaba haciendo ese trabajo cuando en diciembre, como el 26 de diciembre, me llega un email
Lydiana Garcia (26:24.994)
y ahí me llegan muchos e-mails que a veces que son como raros. Me llega un email de la que eventualmente se convierte en meditora diciéndome que es de Grupo Planeta y que tenían un proyecto, un proyecto, no me acuerdo ahora cómo lo puso, pero un proyecto como este tipo de libro, que querían proponermelo y que querían hacer una llamada. La cosa fue que hicimos un Google Meet antes del final del año y ella...
me dice mira te escuché en se regalan dudas pienso que sería espectacular para escribir un libro sobre el tema de la herida materna y ahí fue que yo me quedé como me puse en shock y se lo que clásicamente hacía que ya estoy trabajando para no hacerlo que dije yo pues déjame pensarlo primero y después le no creo que le dije
No, no, yo no me siento todavía capaz porque dos semanas antes tuvimos el taller de la toma de la madre y mí se me hizo difícil y viene alguien a decirme, escribo un libro sobre el herido de materna. A mí fue como que, ay no, como yo, quizás yo en cinco años, pero yo ahora estoy trabajando esto. Y me saqué, sea, por el síndrome del impostor se apoderó de mí por completo y le dije no.
La cosa es que ella, bueno pues qué pena porque pensamos que sería espectacular. La cosa es que terminamos la conversación, después yo me voy a hablar con unas amistades, me siento, me hago más enraizamiento y como la segunda semana de enero yo digo, ¿qué te pasa, Lidiana? Si te está llegando esta oportunidad, aprovéchala. Mira qué necesitas hacer para prepararte y además esto toma tiempo, no es que vas a escribir un libro, eso fue en Navidad del 2022.
No es que vas a hacer eso no va a salir ahora, tranquila, dile que sí y lo vas a escribir bajo lo que... tú vas a hacer toda la práctica para que puedas a través de ti nacer este libro que está pidiendo. La cosa fue que a las dos semanas le escribí y le dije ¿sabes qué? Estamos todos en proceso de aprendizaje, pienso que sería bueno, me recordé todos estos años que trabajé con diadas de madres e hijos y toda mi experiencia trabajando como psicóloga.
Lydiana Garcia (28:43.18)
y experta en trauma y aunque las constelaciones era todavía algo nuevo ellos querían que yo integrara las constelaciones fue como que yo puedo vamos que te pasa y ahí entonces le dije que sí luego de eso tardó como unas tardó como unos seis meses el contrato no se firmó como hasta ocho meses después no un poquito más y no empecé a escribir el libro sino hasta como octubre el 2023
cuando ya había terminado ese curso, ya había empezado otro, ya había empezado la formación formalmente. Y entonces terminé de escribirlo 2024. Como en seis meses lo terminé y luego unos cambios que aquí hayan. Y desde el 2024 que escribí, el manuscrito no es ahora hasta 2025 que sale. el proceso de proyectos literarios y de escritura con casas editoriales tiende a tardar. Así que ahí salió.
Y con esto, con lo que quiero decirle, el mensaje principal aquí es cuando algo te llama, cuando algo se acerca a ti y uno todavía no se siente preparado, uno todavía no se siente que es capaz, que tiene la información adecuada o correcta. ¿Y cómo entonces confiar? Porque el proceso de escritura, que después le contaré en otro, y si alguien tiene preguntas también envíenmelas con mucho gusto.
fue otro también que trajo de mí y sacó de mí muchas cosas pero era esa parte de cuando el alma te susurra el cuerpo aunque lo resista ya lo sabe y cómo permitir ser ese canal, esa vía por la cual nacen cosas antes de eso yo había tomado una formación bueno un grupo con Nisha Moodley que creo que hablado de ella y ella hablaba
de esa parte de esa idea del animismo de cómo conectar con tus creaciones y tu co-crear no que eres tú y así mismo fue que yo intencioné este libro y todo fue pero fue a través de mí, a través de mis manos marcándola en el teclado de la computadora a través de mis pensamientos pero yo tuve que hacer mucho para decir esta entre comillas alma del libro quiere salir a través de mí y por qué no
Lydiana Garcia (31:07.726)
si yo tengo la experiencia, tengo una manera de expresarlo, hay cosas que quieren salir a través de ti, porque quieren salir a través de ti, no a través del experto allá o la persona, y aunque pienses que no eres experto, experto de tu vida, y yo pues coño, yo decía, yo no soy experta, pero yo llevo en ese momento llevaba más de 15 años como terapeuta, o sea, pues que más tiempo, pero esa idea de estos síndromes del impostor, cuando tenemos internalizado.
la opresión internalizada y muchas cosas que traigo en el libro que hacen que uno se limite y que uno diga no, yo no o mejores a otra persona y no hay cosas que son a través de ti y si me estás escuchando aquí y todavía estás escuchando ahí te pregunto qué hace que sigas escuchando o sea hay veces que esta voz puede conectar contigo hay personas que hay muchos maestros
pero hay maestros particulares que conectan contigo. Por eso es importante no limitarse de no porque ya esa persona está haciéndolo o no porque yo no tengo esta experiencia o no. Habla desde ti, desde tu experiencia vas a poder llegar a unas personas que otras personas no lo pueden llegar. Y entonces, este libro me eligió. Y quizás tú también estés listo, lista para mirar lo que te ha elegido. No solamente a mirarlo.
sino también a permitir ser utilizado para algo que quieren hacer a través de ti. Y con eso termino el episodio. Pero antes de eso, les quiero decir que no solamente esto es un programa de 10 semanas que voy a estar contando toda esta historia, sino que estoy creando un canal de WhatsApp para ayudar a contar más y dar cosas extra que no cuento aquí necesariamente en este...
podcast de estas próximas 10 semanas para ayudarte, bueno, contarte la parte detrás de la historia pero también ya darte una destreza y unas cosas y unas reflexiones en este proceso de sanar estas heridas invisibles como lo es la de la herida materna. Así que te invito a que te unas a nuestro canal de WhatsApp que también está aquí abajo para que puedas entonces de esa manera
Lydiana Garcia (33:26.046)
participar y ahí voy a tener en el día de hoy que hoy sale este canal va a haber un audio íntimo sobre cómo fue ese instante frente a la figura que ya les enseñé y lo que me dijo mi niña interna así que únanse y ahí les veo muchas gracias por escuchar cuídense mucho y nos vemos la próxima semana van a estar saliendo todos los miércoles
estos episodios. Este fue el más largo, lo usualmente van a ser más cortos, pero para que sepan. Gracias, Júntense aquí al canal de WhatsApp para que se enteren mejor y nos vemos entonces. Chao.