
NeuroRebel Podcast
Why NeuroRebel?
This isn't your typical neurodiversity podcast. Drawing from years of academic experience and personal lived experience, each episode is carefully crafted to provide substantive, science-backed information. Whether you're neurodivergent yourself, a family member, educator, or simply curious about how different brains work, you'll find content that challenges assumptions and deepens understanding.
Bilingual Accessibility
Episodes are available in both English and Spanish, making vital neurodiversity information accessible to broader communities. Because understanding your brain shouldn't depend on language barriers.
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- Neurodivergent individuals seeking evidence-based information
- Parents and families navigating neurodivergence
- Educators and professionals working with neurodivergent populations
- Anyone interested in the science behind different ways of thinking
- Spanish and English speakers looking for quality neurodiversity content
Join the rebellion against misinformation and discover the fascinating world of neurodivergence through the lens of rigorous research and authentic lived experience.
New episodes released weekly. Available in English and Spanish.
NeuroRebel Podcast
El Fenotipo Ampliado del Autismo: El Concepto Científico que No Existe
¿Qué pasa cuando toda una comunidad de expertos dice que lo que estás estudiando en realidad no existe?
En esta investigación profunda, Anita examina el Fenotipo Ampliado del Autismo (FAA) - un concepto científico ampliamente aceptado que afirma que los rasgos relacionados con el autismo existen en un continuo en las familias. Pero cuando finalmente se les preguntó a los investigadores autistas qué pensaban, sus respuestas deberían haber revolucionado el campo.
Descubre:
- Por qué las estimaciones de prevalencia del FAA varían del 2.6% al 80%
- Cómo los investigadores usan "rasgos autistas" sin definir el término
- Lo que realmente piensan los académicos autistas sobre esta investigación
- Por qué los mismos comportamientos se patologizan en algunos contextos pero no en otros
- Una explicación alternativa que podría cambiar todo
- Cómo las ideas del Norte Global se exportan a América Latina sin validación cultural
"Todos hacen stimming, pero solo lo llamamos así y lo patologizamos cuando ciertas personas neurodiversas lo hacen." - Alyssa Hillary, investigadora autista
Esta historia revela el colonialismo científico, cuestiona quién decide qué es "normal" en nuestras familias, y demuestra por qué necesitamos investigación CON personas autistas, no solo SOBRE ellas.
El fenotipo ampliado podría ser un fantasma, pero la sabiduría comunitaria autista es muy real.
Advertencia: Discusión de investigación genética y colonialismo científico.
Encuentra las notas de este programa en www.neurorebelpodcast.com
Thank you for listening to Neuro Rebel — the bilingual podcast where we flip the script on what it means to think differently. I’m your host, Anita: autistic, gifted, and a retired law professor on a mission to bring rigor, empathy, and a dash of rebellion to conversations about neurodiversity.
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Each week, we blend evidence-based deep dives, solo reflections, and candid interviews with researchers and lived-experience experts. Expect English ↔ Español segments, sharp wit, real stories and actionable insights you can share with friends, colleagues, and classrooms.
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Alguna vez te has preguntado quién decide qué es normal en nuestras familias? Recientemente me topé con un concepto científico llamado el fenotipo ampliado del autismo, el cual se está exportando desde el norte global hacia nuestras comunidades latinoamericanas. Y lo que descubrí fue una historia sobre colonialismo científico, 20 investigadores autistas que desafiaron décadas de ciencia, y una pregunta que podría cambiar cómo pensamos sobre el autismo completamente. Soy Anita y esto es NeuroRebel. Bienvenidos a NeuroRebel el podcast que desafía las narrativas convencionales sobre la neurodivergencia con análisis informado por la investigación y autenticidad. Sin disculpas. Soy Anita, tu anfitriona. Soy autista de altas capacidades, profesora de derecho, retirada investigadora y orgullosamente residente de México, donde creo contenido para conectar el rigor académico con la experiencia vivida. Si esta es la primera vez que nos escuchas, bienvenido a nuestra comunidad de pensadores críticos y rebeldes. No hacemos porno inspiracional, no simplificamos en exceso y definitivamente no romantizamos la neurodivergencia. En su lugar, nos sumergimos profundamente en la ciencia. Desafiamos las suposiciones y centramos las voces que más importan: las nuestras. Antes de comenzar la investigación de hoy, les voy a pedir un pequeño favor. Si este podcast agrega valor a tu vida, por favor toma 30 segundos para seguir o suscribirte en tu plataforma preferida. Comprártelo con alguien que necesita escuchar estas conversaciones. Deja una reseña si te sientes generoso. Ayuda a otras personas a encontrarnos en el desierto algorítmico. Y si quieres apoyar este trabajo financieramente, puedes encontrar enlaces para hacerlo en las notas del programa. El concepto con el que me topé se llama el fenotipo ampliado del autismo y a primera vista, este concepto parecía lógico. La idea es elegantemente simple. El autismo es hereditario, así que los familiares de las personas autistas podrían tener lo que los investigadores llaman rasgos autistas sub clínicos. Ya conoces la imagen, tal vez un padre que siempre ha sido un poco torpe. Socialmente, alguien que tiene intereses intensos que rozan en lo obsesivo, o alguien que muestra algunos patrones de pensamiento rígido. No es lo suficiente para un diagnóstico de autismo, pero definitivamente es algo. A los genetistas les encanta este concepto porque sugiere que el autismo existe en un continuo y que estos rasgos representan lo que llaman la responsabilidad genética para la condición de autismo. Suena razonable, verdad? Yo también lo pensé. La investigación parecía sólida: estudios de gemelos mostrando alta heredabilidad, estudios familiares, documentando rasgos elevados en familiares, incluso estudios de neuro imagen, mostrando diferencias neurológicas en miembros de la familia que muestran estas características. Pero entonces comencé a profundizar, y lo que encontré fue una historia sobre la brecha entre lo que la ciencia afirma descubrir y lo que las comunidades ya habían notado por experiencia propia. Pero esta historia tiene una dimensión adicional que quiero explorar contigo hoy. No solo se trata de un concepto científico problemático, se trata de cómo las ideas del norte global se exportan a nuestras comunidades latinoamericanas sin consideración por el contexto cultural, las necesidades locales o las voces de nuestras propias comunidades neurodivergentes. Hoy vamos a ser detectives. Vamos a examinar un concepto científico que ha moldeado como pensamos sobre la genética del autismo, que ha influenciado las prácticas de consejería genética y potencialmente ha patologizado la variación humana normal a escala masiva. Y vamos a preguntarnos qué pasa cuando exportamos ciencia problemática del norte global al sur global sin el filtro crítico que nos merecemos. Permíteme pintarles un cuadro más detallado de cómo el fenotipo ampliado del autismo típicamente se presenta en contextos de investigación y clínicos y como está llegando a nuestras comunidades. La historia generalmente va así. Leo Kanner, quien describió por primera vez el autismo en 1943, notó que los padres de niños autistas a menudo parecían compartir ciertas características: eran, en sus propias palabras, personas fuertemente preocupadas con abstracciones de naturaleza científica, literaria o artística. Y limitadas en interés genuino por las personas. Avancemos unos 80 años y esta observación casual se ha convertido en un campo de investigación masivo. Pero aquí está lo que me molesta como académica latina. Esta observación se hizo sobre familias blancas, de clase media, en estados unidos, en los años 40. Cuánta validez tiene para nuestras familias en México, Argentina, Colombia, Venezuela o cualquier otro lugar de América Latina. Alguien se molestó en preguntarlo? La investigación moderna del fenotipo ampliado del autismo se enfoca en tres dominios principales que reflejan los criterios diagnósticos del autismo: desafíos de comunicación social, intereses restringidos, y comportamientos repetitivos. Y lo que los investigadores diplomáticamente llaman: rasgos de la personalidad rígida. La idea es que los familiares de personas autistas muestran características a tasas más altas que la población en general, pero a niveles sub clínicos. Y aquí es donde entra el colonialismo científico. Estos instrumentos de medición desarrollados en contextos anglosajones, se están traduciendo y aplicando en América latina sin validación cultural adecuada. En Argentina, veo que hacen un screening del fenotipo ampliado de autismo, usando herramientas traducidas. En México, programas de consejería genética importando evaluaciones del fenotipo ampliado de autismo se usan sin rigor. En Colombia, se usan intervenciones educativas basadas en el de déficit del fenotipo ampliado del autismo en hermanos. Pero quien decidió que estas categorías son relevantes para nuestra cultura? Quién determinó que lo que se considera rígido en Minnesota también es problemático en Medellín. Ahora, como alguien que pasó décadas en la academia antes de transicionar al activismo y como latina viviendo entre culturas, sé cuán seductor puede ser este tipo de evidencia convergente. Cuando múltiples enfoques metodológicos, como la genética, la neuro imagen, la evaluación conductual, todos apuntan en la misma dirección, se crea lo que llamamos un consenso científico. Pero aquí es donde mi identidad múltiple como académica autista y latina creó una tensión interesante. Mientras más leía sobre el fenotipo ampliado del autismo, más se sentía incorrecto. No equivocado exactamente, sino incompleto. Como si fuera una receta de cocina francesa, siendo aplicada a ingredientes mexicanos sin considerar las diferencias. La primera bandera roja fue metodológica, pero con implicaciones culturales profundas. Una revisión sistemática publicada en el 2018 encontró que las estimaciones de prevalencia para el fenotipo ampliado del autismo, oscilaban entre el 2.6% y hasta el 80% por porciento entre diferentes estudios. Déjame repetir esto de 2.6% y hasta el 80%. Ahora no se tú, pero cuando yo veo una variación metodológica así, mis alarmas académicas comienzan a sonar. Eso no es medición de un fenómeno biológico estable. Eso es un caos metodológico. Y cuando ese caos se exporta a nuestros contextos, sin cuestionamiento crítico, se convierte en colonialismo. Pero mientras más profundicé, más me encontré con algo aún más problemático. Ambigüedad definitoria con dimensiones culturales. A pesar de cientos de artículos de investigación usando el término rasgos autistas, había notablemente poco esfuerzo para definir lo que los investigadores realmente querían decir con ese término. Y absolutamente ningún esfuerzo para considerar cómo estos rasgos podrían ser interpretados diferentemente en diferentes contextos culturales. Piénsalo por un momento: en muchas culturas latinoamericanas, lo que los investigadores estadounidenses llaman dificultad con el contacto visual podría simplemente ser respeto cultural hacia las autoridades. Lo que llaman comunicación directa problemática podría ser honestidad valorada. Y lo que etiquetan como intereses restringidos podrían ser especialización respetada. Entonces, estamos patologizando nuestras propias normas culturales cuando aplicamos estos instrumentos sin crítica? Y ahí fue cuando recordé algo que una mentora me dijo una vez, cuando los expertos no están de acuerdo, averigua que dicen las personas que viven con la experiencia. Lo que me llevó a hacer una pregunta que francamente, debería haberse hecho décadas atrás. Y es ésta: qué piensan los investigadores autistas sobre este concepto? Resulta que alguien si había hecho esta pregunta. Un académico independiente autista llamado Nick Chown, publicó lo que debería haber sido un artículo que cambiara paradigmas en el 2019. Solo el título debería haber hecho que cada investigador del fenotipo ampliado del autismo se detuviera y pensara. Y el título es este:"Son los conceptos de rasgos autistas y fenotipo ampliado del autismo reales o míticos?". Ahora, Nick Chown no es solo un blogger al azar con una opinión. Es un académico con profunda experiencia en metodología de investigación del autismo. Y abordó esta pregunta con el tipo de rigor sistemático que hace llorar de alegría a los académicos. Pero lo que hizo su análisis particularmente poderoso fue su conocimiento interno. El mismo es autista, así que entendía tanto la investigación como la experiencia vivida que afirmaba representar. Pero aquí está lo que me molesta. Su trabajo ha sido en gran medida ignorado en los círculos de investigación del fenotipo ampliado del autismo, especialmente cuando esas ideas se exportan a América Latina. Por qué estamos importando ciencia que incluso los expertos autistas del norte global están cuestionando? Lo que Chown descubrió fue sorprendente. Y tiene implicaciones enormes para cómo pensamos sobre la traducción cultural de conceptos científicos. A pesar de ser usado en cientos de artículos de investigación, el término rasgos autistas casi nunca se define explícitamente. Los investigadores estaban participando en lo que él llamó un juego de lenguaje. Todos asumían que todos los demás sabían lo que querían decir, pero nadie realmente lo explicaba. Y cuando traduces conceptos mal definidos del inglés al español, del contexto anglosajón al latino americano, las posibilidades de mal entendido se multiplican exponencialmente. Estamos importando confusión conceptual y llamándola ciencia. pero Chown no se detuvo en el análisis lingüístico. Hizo algo que francamente, debería ser práctica estándar en la investigación del autismo, pero rara vez sucede. Y es esto: les preguntó a los investigadores autistas. Qué pensaban sobre el concepto que sus colegas no autistas estaban estudiando. Chown encuesto a 20 investigadores autistas que se dedican a investigar el autismo. Que son personas que tienen tanto experiencia vivida como experiencia académica. E stos no eran miembros aleatorios de la comunidad. Eran académicos con títulos avanzados, investigaciones publicadas y entendimiento profundo de la literatura del autismo. La pregunta que les hizo era engañosamente simple y les dijo: existen los rasgos autistas como entidades discretas y medibles? Las respuestas que obtuvo deberían haber causado un revuelo en la comunidad de investigación del autismo. Pero antes de compartirles lo que dijeron, déjenme en preguntarles algo que podría ayudarte a entender por qué sus respuestas fueron tan significativas. Piensa por un momento en comportamientos que podrías considerar como rasgos autistas. Tal vez el stimming: movimientos o sonidos repetitivos, o tal vez la dificultad con el contacto visual. O a lo mejor intereses intensos y enfocados. O una preferencia por la rutina y predictibilidad. O la necesidad de ambientes tranquilos y de baja estimulación. Los tienes en mente? perfecto. Ahora, aquí está la pregunta que cambió todo para mí. Alguno de estos comportamientos son realmente únicos de las personas autistas? Tomemos el stimming, por ejemplo. Es que solo las personas autistas se inquietan, golpean sus pies, juegan con su cabello o participan en movimientos repetitivos? Por supuesto que no. Las personas neurotípicas hacen stimming constantemente, solo que no lo llaman stimming y nadie lo patologiza cuando lo hacen. Y que hay de los intereses intensos? Es que las personas autistas son las únicas que se absorben profundamente en temas específicos? Recolectan información detallada? O pasan horas involucradas con sus pasiones? Obviamente no. Cuando las personas neuro típicas hacen esto, las llamamos entusiastas, expertas o apasionadas. Pero cuando las personas autistas lo hacen, de pronto se convierte en un interés restringido que necesita intervención. Ven el patrón que va emergiendo? Otro investigador del autismo, Luke Bearden, cristalizó esta perspectiva perfectamente. Observó que no existe tal cosa como un comportamiento autista. No hay un solo comportamiento o conjunto de comportamientos mostrados por personas autistas que no se pueda ver en personas no autistas. Piensa en las implicaciones profundas de esa declaración. Si no hay comportamientos que sean únicos del autismo, entonces, Qué exactamente están midiendo los investigadores cuando evalúan rasgos autistas en miembros de la familia. Qué hace que un rasgo sea autista versus simplemente humano? Y cuando exportamos estas categorías problemáticas a América Latina sin cuestionamiento crítico, estamos midiendo fenómenos biológicos? O estamos imponiendo marcos conceptuales extranjeros sobre nuestras propias formas de ser. Ahora puedo compartir lo que estos 20 investigadores autistas le dijeron a Chown Y por qué sus respuestas deberían haber revolucionado como pensamos sobre la investigación del fenotipo ampliado del autismo. Alisa Hilary, de la universidad de Rhode Island, proporcionó tal vez la articulación más clara. Y dijo:"usando tu definición, yo diría que no existe tal cosa como rasgos autistas o rasgos del autismo. No existen. No creo que haya rasgos universales del tipo que describes. No existe tal cosa como una acción que sea única del autismo. Todos hacen stimming, pero solo lo llamamos así, y lo patologizamos localizamos cuando ciertas personas neurodiversas lo hacen". Deja que eso se asiente por un momento. Una investigadora, tanto con experiencia vivida como experiencia académica, está diciendo que el concepto fundamental que subyace décadas de investigación del fenotipo ampliado del autismo, la idea de que hay rasgos autistas medibles en realidad no existe. Ven lo que está pasando aquí? No estamos midiendo fenómenos biológicos, estamos midiendo procesos de etiquetado social. El fenotipo ampliado del autismo podría estar documentando realmente como patologizamos selectivamente la variación humana normal cuando ocurre en ciertos contextos. Y cuando exportamos estos marcos conceptuales de etiquetado a América Latina, estamos esencialmente exportando formas de patologizar nuestras propias comunidades basadas en normas culturales extranjeras. Otros encuestados notaron los aspectos de construcción cultural y social de la identificación de rasgos. Varios señalaron que los mismos comportamientos se interpretan diferentemente, dependiendo de quién los exhibe. Por ejemplo, cuando alguien ya etiquetado como autista o de una familia autista muestra estas características, los comportamientos se convierten en rasgos autistas. Pero cuando otros muestran estas características, son solo peculiaridades de personalidad o diferencias individuales. Pero Chown propuso aún algo más revolucionario. Y si la evidencia típicamente citada para apoyar al fenotipo ampliado de autismo no es realmente evidencia para rasgos subclínicos en absoluto? Y si, en su lugar, es evidencia de que el autismo es más común de lo que actualmente reconocemos? Piénsalo. Y si muchos individuos etiquetados como teniendo rasgos autistas, sub clínicos, son realmente autistas pero no diagnosticados? Y si la investigación del fenotipo ampliado del autismo ha estado documentando la presencia de personas autistas adicionales en familias ya afectadas por el autismo, en lugar de documentar responsabilidad genética para rasgos sub clínicos? Esta explicación alternativa explicaría muchas cosas. Por ejemplo, el agrupamiento familiar de rasgos. O las estimaciones altas de heredabilidad. o las diferencias de neuroimagen. Incluso las estimaciones de prevalencia enormemente variables. Porque diferentes estudios podrían estar capturando diferentes proporciones de individuos autistas simplemente no diagnosticados y todo dependiendo de su metodología y su población. Esta explicación, se vuelve aún más convincente cuando consideras que el contexto histórico del diagnóstico del autismo en Latinoamérica es muy diferente a la experiencia del norte. Sabemos que el autismo ha sido sistemáticamente sub diagnosticado en mujeres, en personas de color, en individuos sin discapacidades intelectuales y en personas que desarrollan estrategias efectivas de enmascaramiento. Pero en nuestros contextos latinoamericanos, si agregas las barreras adicionales, como por ejemplo, el acceso limitado a servicios diagnósticos, la falta de profesionales entrenados y actualizados y los instrumentos diagnósticos desarrollados en otras culturas, y también si la pobreza sistémica, que hace que el diagnóstico especializado sea inaccesible para muchas familias. Todo esto demuestra el sesgo que existe y el cual es impactante. Cuántas personas autistas en nuestras comunidades están siendo categorizadas como teniendo rasgos sub clínicos, cuando en realidad son autistas. Completos. Que simplemente no han tenido acceso a diagnósticos culturalmente apropiados. Pero aquí está la parte que más me molesta como académica latina. Cuando importamos estos marcos del fenotipo ampliado de autismo sin crítica alguna, estamos esencialmente permitiendo que el norte global defina qué significa ser normal, entre comillas, en nuestras familias. Más allá de la problemática de usar etiquetas como normal. Cuando lo normal no es neutral, estamos usando instrumentos desarrollados en Minnesota para evaluar familias en Monterrey. Estamos aplicando normas sociales anglosajonas para interpretar comportamientos en Buenos Aires. Estamos permitiendo que investigadores que nunca han vivido en nuestros contextos culturales, determinen que constituye responsabilidad genética en nuestras comunidades. Eso amigos, es colonialismo científico en su forma más pura. Entonces, dónde nos deja esta investigación? Yo creo que revela algo profundo sobre cómo se construye el conocimiento científico. Cuáles voces se escuchan en ese proceso y cuáles se excluyen. y cómo el poder se distribuyen la ciencia global. La historia del fenotipo ampliado del autismo no es solo sobre un concepto de investigación que salió mal. Es un estudio de caso, de lo que pasa cuando la investigación procede sin aporte significativo de las comunidades que están siendo estudiadas. Es sobre la diferencia entre estudiar personas y estudiar con personas. Y también es sobre como el sur global a menudo se convierte en un mercado pasivo para las ideas del norte global, sin el filtro crítico que nos merecemos. Por décadas, investigadores han estado midiendo categorizando y teorizando sobre rasgos en familias autistas sin sentar las perspectivas de las personas autistas mismas. Cuando investigadores autistas finalmente fueron consultados sobre que pensaban del concepto fundamental que subyace esta investigación, su respuesta fue esencialmente, esto no existe de la manera que piensan que existe. Las implicaciones metodológicas son asombrosas, pero para nosotros, en América latina, hay una dimensión adicional. Si la crítica es correcta, entonces no solo estamos hablando de cientos de estudios, millones de dólares en fondos de investigación, y marcos teóricos completos que pueden estar basados en un error conceptual. Estamos hablando de importar ese error sin cuestionamiento y aplicarlo a nuestras propias comunidades. Cuántos recursos que podrían haberse usado para desarrollar servicios de apoyo culturalmente apropiados, se han desviado hacia la investigación del fenotipo ampliado del autismo. Cuántas familias latinas han sido etiquetadas con responsabilidad genética basada en instrumentos que nunca fueron validados para nuestros contextos? Cuántas veces hemos permitido que definiciones extranjeras de lo normal patologizen lo que podría ser simplemente diversidad cultural, o neurodivergencia no reconocida. Pero más allá de las implicaciones académicas, esto tiene consecuencias del mundo real para las personas autistas y sus familias en nuestras comunidades. La investigación del fenotipo ampliado del autismo ha influenciado prácticas de consejería genética. Ha moldeado cómo las familias se se entienden a sí mismas. Y ha contribuido a conversaciones sobre prevención del autismo. Si la crítica de la neurodiversidad es correcta, si estos llamados rasgos subclínicos realmente representan variación humana normal o autismo no diagnosticado, entonces enmarcarlos como responsabilidad genética se convierte no solo en científicamente cuestionable, sino éticamente problemático. Y Y cuando importamos este marco ético problemático a nuestros contextos sin crítica, nos convertimos en cómplices de nuestro propio colonialismo intelectual. Pero aquí está lo que me da esperanza y por qué quería compartir esta investigación contigo. La misma investigación que se ha usado para apoyar el fenotipo ampliado del autismo realmente apunta hacia algo mucho más interesante y afirmativo. Y es esto: y si los rasgos autistas no son de déficits o responsabilidades genéticas? Sino simplemente variaciones en el funcionamiento neurológico humano? Y si los hallazgos genéticos no documentan patología, sino más bien la heredabilidad de formas neurodivergentes de ser. Y si en lugar de tratar de prevenir o predecir el autismo, nos enfocáramos en entender y apoyar a las personas autistas que si estamos aquí? imagina investigación del autismo que comience con experiencias autistas, en lugar de tratar de explicarlas. Investigación que pregunta: cómo podemos crear ambientes más accesibles, en lugar de: cómo podemos hacer que las personas autistas sean más normales? Investigación que vea los rasgos autistas como contribuciones potencialmente valiosas a la diversidad humana en lugar de problemas a resolver. Imaginen esta investigación siendo liderada desde nuestras propias comunidades con nuestros propios valores y respondiendo a nuestras propias necesidades. Si tomas una sola cosa de esta investigación. Que sea esto: la próxima vez que encuentres una investigación sobre el autismo, o realmente, cualquier investigación sobre comunidades marginalizadas, especialmente si está siendo importada del norte global, hazte algunas preguntas. Pregunta: quién fue incluido en el diseño de este estudio? Quién fue excluido en el diseño de este estudio? Quién fue incluido en la interpretación de los resultados? Cuáles voces fueron centradas y cuáles fueron marginalizadas? Y pregúntate, responde esta investigación a las necesidades de nuestras comunidades? O sirve las agendas de otros? Demanda que la investigación incluya las comunidades que estudian como socios, no solo como sujetos. Apoya a investigadores que son miembros de las comunidades que estudian. Cuestiona investigación que patologiza la diferencia sin considerar explicaciones alternativas o contextos culturales. Y para mis oyentes autistas específicamente, confía en tus instintos sobre investigación que no suena verdadera para tu experiencia. Tu experiencia vivida importa. Tus perspectivas son valiosas. El hecho de que haya sido excluido de muchas de las investigaciones sobre ti, no hace que esa investigación sea más objetiva. Simplemente la hace incompleta. Y para todos nosotros en América Latina: Tenemos el derecho y la responsabilidad de filtrar críticamente qué ideas científicas importamos. Tenemos el derecho y la soberanía intelectual. Tenemos el derecho a investigación que responda a nuestras necesidades, respete nuestras culturas e incluya nuestras voces. Comencé esta investigación pensando que estaba examinando un concepto científico. Y terminé descubriendo algo mucho más importante: el poder del conocimiento comunitario, el coraje de investigadores dispuestos a cuestionar narrativas establecidas y la urgencia de descolonizar cómo pensamos sobre la neurodivergencia. El fenotipo ampliado del autismo podría ser un fantasma. Pero la sabiduría de la comunidad autista es muy real y es hora de que el mundo de la investigación, especialmente en nuestras comunidades, empiece a escuchar. Esto ha sido NeuroRebel y soy Anita, tu anfitriona. Si este episodio desafio tu pensamiento, validó tus experiencias o simplemente te dió algo en que reflexionar, Por favor, comparártelo con alguien que necesita escucharlo. Nuestro próximo episodio explorará estrategias específicas para desarrollar investigación de autismo culturalmente responsiva en América latina, incluyendo cómo construir capacidad de investigación local, y cómo centrar las voces de nuestras propias comunidades neurodivergentes. Puedes encontrar notas del programa, transcripciones y recursos adicionales en mi sitio web neurorebelpodcast.com. Síguenos en redes sociales para actualizaciones y conversación continua. Y si este trabajo, agrega valor a tu vida, considera apoyarlo financieramente a través de los enlaces de nuestra página. Recuerda, no necesitamos ser arreglados curados o prevenidos. Necesitamos ser entendidos, apoyados y valorados por quienes somos. Hasta la próxima, muchas gracias por escucharnos y por tu valioso tiempo. Sigue cuestionando, sigue desafiando y sigue siendo hermosamente neurodivergente y sin disculpas.