Había una vez...Un cuento, un mito y una leyenda

703. El otro

Juan David Betancur Fernandez Season 8 Episode 30

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Juan David Betancur Fernandez
elnarradororal@gmail.com


Habia una vez un hombre llamado Julian  que vivía una vida muy tranquila . A sus 40 años todo le había salido bien, pero hacia varios días estaba teniendo algunos sueños perturbadores durante la noche. Había estado soñando que estaba en algún otro lado y que nada de lo que hacia se parecía a lo que usualmente hacia. Esto le pareció extraño y gracias a un consejo de un buen amigo decidio visitar a un psiquiatra. 

Con la dirección apuntada en un pequeño papel llego al edificio donde el doctor tenía su consultorio y decidido entro en la oficina del psiquiatra para comentarle un poco de sus extraños sueños. Después de auscultarlo y escucharle la narración el psiquiatra le hizo algunos test y después de algunos momentos le dijo. 

Mi amigo usted sufre de un severo caso de desdoblamiento de la personalidad que se manifiesta durante la noche. Déjeme lo hipnotizo para regresarlo a una de sus personalidades 

Julian oyó estas palabras y no podía creerlo. Soltó una carcajada y dijo. Que disparate esta diciendo yo se quien soy y no acepto su diagnostico. 

Al salir del consultorio empezó a preguntarse a si mismo. Como podía ese medico decir eso. Como podía no ser el mismo. Como podía existir otro yo que viviera su vida sin que el lo supiera. Y como era posible que el no supiera nada. Indignado decidio olvidar aquella consulta tan absurda. 

Pero el destino y el mundo no estaba dispuesto a dejarlo en paz. 

Mientras caminaba por la calle vio como una pareja se le acercaba y lo saludan con mucho entusiasmo. 

Ernesto que bueno que te encontramos. Hace días no nos veíamos. Como has estado. Que ha sido de ti en estos últimos meses. 

Julian extrañado les dijo. Ernesto quien es Ernesto. Yo soy Julian. La pareja solto una risa y dijeron. Que bromista eres Ernesto. Nos tenemos que ir pero te esperamos en nuestra casa para comer algún día. 

 Julian los vio partir y siguió caminando pensando que seguramente lo habían confundido con otro. Pero al llegar a la plaza del pueblo vio como un hombre se le acercaba y le decía. Ernesto como te atreves a estar en la calle, deberías estar trabajando, tu jefe se va a enterar y te va a despedir. Julian que no trabajaba no entendio como le decían eso pero de nuevo pensó que simplemente lo habían confundido con un tal Ernesto de nuevo. 

Acelero el paso deseando llegar a su casa, pero al llegar a su puerta y tratar de abrirla se dio cuenta que su llave no funcionaba. Trato varias veces pero nunca funciono. Así que alterado toco el timbre de la puerta. 

La puerta se abrio y una mujer que el claramente reconoció como su madre le dijo. 

Buenas tardes, digame quien es usted y en que le puedo ayudar. 

Julian no podía creer lo que estaba sucediendo. Allí estaba frente a su madre y ella no lo reconocia. 

Desesperado le dijo. Madre soy Julian, Pero la mujer le dijo. Lo siento joven no soy su madre y no se quien es Julian. Le propongo que se aleje antes de que mi hijo Ernesto llegue. 

Allí todo fue oscuro en la mente de Julian. Todos hablaban de un tal Ernesto y nadie lo reconocia como Julian e inmediatamente recordó lo que el psiquiatra le había dicho.   Seguramente si tenía un problema de doble personalidad y que ahora estaba convertido en otro que el no reconocia. 

Asustado retrocedio y salió corriendo. Y corrio y Corrio hasta que llego al edificio del siquiatra y empujando la puerta de consultorio lo enfrento. 

Doctor devuélvame mi otra personalidad Yo no soy Ernesto yo soy Julian 

El medico lo miro con mucho desconcierto y le dijo. 

Disculpeme quien es usted, mientras pulsaba discretamente el boton de emergencia que tenía bajo su